"Estamos viviendo un crecimiento muy importante"

¿Por qué es importante estar en la Feria Internacional de Turismo, Fitur? La alcaldesa de Úbeda, Toni Olivares, lo tiene claro. O se está o no se existe. Además, el efecto retorno es inmediato. Tanto que la regidora reconoce que la ciudad Patrimonio de la Humanidad está "sufriendo" un crecimiento muy importante. Tanto que, poco a poco, rompen con esa estacionalidad tan propia de la provincia de Jaén. Ella, junto con su homóloga en Baeza, Lola Marín, acapara la atención de la edición de este año gracias al 15 aniversario de la declaración de la Unesco.

—¿Cómo os hace sentir el que Úbeda y Baeza son las protagonistas de esta edición de Fitur y viendo que hay ganas de que lo seáis?

—Para nosotros fue un largo camino poder ser ciudades Patrimonio de la Humanidad y poder demostrar ese valor universal que queríamos legar a todo el mundo y que éramos el ejemplo del Renacimiento del Sur; el modelo que se adoptó después en toda América del Sur. Ha sido un camino tan largo, vivido con tanta expectación, que ahora, después de quince años, para nosotros es un gran aniversario. Que la Diputación y la Junta hayan entendido que teníamos que ser la seña de identidad del estand de Jaén en Fitur es una muestra de apoyo y de confianza muy grande. Estamos locas de contentas y satisfechas.

—Esta no es vuestra única cita...

—Ya empezamos la World Travel Market de Londres, llevando un producto específico para el turista inglés, que todavía tienen muchas posibilidades de crecimiento en nuestro destino. Además hemos preparado una programación espectacular para todo el año, para que quienes nos visiten a lo largo de 2018 y la propia población de Úbeda y Baeza vivan de primera mano la celebración de ese aniversario.

—¿La apuesta por la cultura, por los festivales y por una programación más completa hace que los jiennenses se quieran quedar en Jaén a disfrutar de esos conciertos, exposiciones, teatros...?

—Desde que soy alcaldesa teníamos muy claro nuestra doble responsabilidad. Primero, con todos los colectivos que durante toda la época de crisis habían mantenido la actividad cultural en la ciudad de Úbeda contra viento y marea. Pero también teníamos la responsabilidad y quizás la más importante, es que al ser una ciudad Patrimonio de la Humanidad no puede quedarse sin contenido. Teníamos la obligación de poner en marcha una magnífica programación cultural. Creo que en tan solo dos años y medio lo hemos conseguido. De hecho, hay quienes nos reconocen, y yo también lo hago, como la capital cultural de la provincia de Jaén. Eso hace que ayudemos a que la gente de Jaén y de Úbeda se quede en el territorio porque tiene una oferta cultural de primer nivel. Además, reforzamos el turismo y el comercio. Esta ha sido una apuesta personal mía y del equipo de Gobierno y creo que ese es el camino en el que vamos a seguir insistiendo.

—¿Sois, en parte, un revulsivo para el resto de municipios?

—Sí. Estamos viendo cómo, en parte, somos un revulsivo para el resto de la provincia, que se están animando y quieren seguir los pasos que estamos dando. Se ha creado una dinámica muy interesante, lo que nos obliga a ser cada año más innovadores para seguir manteniendo esa importancia cultural que tiene Úbeda. Creo que es bueno para la provincia y se está notando. Nos alegra ser quienes hayamos sido quienes hayan impulsado esa iniciativa.

—¿Por qué es importante estar en Fitur? Hay quienes dicen que es un despilfarro y no sirve.

—Yo creo que quien dice eso no conoce la realidad turística, por lo menos del destino de Úbeda y Baeza. Cuando no estás en esta feria, simplemente no existes en un mercado turístico complejo y difícil. Tienes que estar y, además, venderte bien y correctamente o no existes, aunque tengas la joya más maravillosa del mundo. El buen paño hay que enseñarlo, hay que venderlo y cuando pasas por estas ferias el retorno a la ciudad es inmediato, no dentro de cinco años ni de tres ni de uno. En unos meses aumenta el número de turistas. Lo estamos viendo prácticamente a diario. En Úbeda estamos sufriendo, en el buen sentido de la palabra, un crecimiento muy importante. Hemos pasado de determinadas épocas del año en las que se concentraba el turista, a que ahora está prácticamente todo el año en Úbeda y Baeza.

—¿Estáis rompiendo con esa estacionalidad turística tan característica de Jaén?

—Es muy complicado y nos queda mucho, pero hemos dado pasos muy importantes.

—¿Tienes alguna espina clavada?

—Es compartida con Lola Marín, la alcaldesa de Baeza. La declaración nos obligaba a tener algún nexo de coordinación que no fuese simplemente la voluntad de quienes están en el sillón de la Alcaldía. En este momento hay muy buena coordinación y compenetración, pero entendemos las dos que debe tener rigurosidad y criterio. No tiene que depender de quién pase por la Alcaldía. Creemos que debe de existir, es pronto todavía, un elemento de coordinación seria y rigurosa de las dos ciudades.

—A Fitur se han traído los dos libros de firmas para que la Catedral de Jaén y el mar de olivos consigan reconocimiento. ¿Cuentan con vuestro respaldo?

—Por supuesto. La Diputación trae los dos libros de firmas. Tanto Lola Marín como yo hemos sido muy claras a ese respecto. Con el olivar estamos al cien por cien y con la Catedral también. Lo que pasa es que sí dejamos muy claro que no estábamos dispuestas a volver a abrir el expediente de Úbeda y Baeza. Estas ciudades ya han demostrado su generosidad con la Catedral de Jaén. Se abrió el expediente, se demostró que no era posible, nos dijeron que no por escrito y se nos avisaba de que si se volvía a producir una acción similar poníamos en riesgo la declaración de Úbeda y Baeza. Eso no le conviene ni a la Catedral ni a la provincia de Jaén, y desde luego ni a nosotros. Mientras estemos Lola y yo, ese expediente no se vuelve a abrir.