La estación de penitencia de los alérgicos

Empiezan a registrase picos destacados de polen de ciprés y urticáceas

Con la Semana Santa a las puertas, hay un sector de la población que vive su particular estación de penitencia. Son aquellos alérgicos al polen para los que la primavera se convierte en una auténtica pesadilla. Y en Jaén, especialmente peor para los que no pueden ni ver el polen de olivo. De momento, ya se detectan picos de cipres y algunos pacientes empiezan a notar síntomas.

El portal de Facebook Niveles de Polen de Jaén, informa de que en los últimos días se han registrado "niveles muy altos de polen de ciprés". Así mismo, se ven los primeros picos de urticáceas. Por su parte, según los datos del observatorio de la Clínica Santa Helena, existe una concentración "moderada" de polen de ciprés. Se detectan concentraciones superiores a 50 granos por metro cúbico. Son cifras que hacen que las personas alérgicas sensibilizadas presenten síntomas. En su recuento del pasado 27 de febrero, se contabilizaron 115 granos por metro cúbico de aire.

Uno de los puntos de referencia para consultar los niveles de polen durante la primavera es la web del Complejo Hospitalario. De hecho, el período con un número más alto de consultas en esta página digital había sido hasta ahora durante la primavera, cuando se publican a diario los datos de los niveles de polen contabilizados a través del dispositivo de captación del hospital público de la capital jiennense del Servicio Andaluz de Salud. De momento, todavía no dan datos.

TEMPORADA 2016

El año pasado, el polen de olivo no llegó a los niveles récord de 2015. Hace dos años se alcanzó un pico de 19.840 granos por metro cúbico de aire. El pasado se llegó a 11.089, según los datos del servicio de Alergología del Complejo Hospitalario de Jaén, del Servicio Andaluz de Salud. El pico más alto se registró el 13 de mayo. A partir de ese momento y hasta mediados de junio, se mantuvieron altos y extremos.

CONSEJOS

Algunos consejos que ofrece los expertos pasan por evitar los ambientes contaminados y protegerse de las infecciones respiratorias que pueden provocar una crisis. Se debe seguir siempre los tratamientos prescritos por el médico. Acudir a los controles rutinarios en su centro de salud y evitar, dentro de lo posible, el desarrollo de actividades en el exterior, especialmente durante los días de viento. Se aconseja limpiar cuidadosamente la casa y eliminando elementos que acumulen polvo o polen como alfombras o muñecos de peluche. No fumar ni frecuentar ambientes cerrados y cargados de humo.

Es importante, en casa, mantener las ventanas cerradas el mayor tiempo posible y viajar con las ventanillas del coche cerradas. Se procurará utilizar gafas de sol para disminuir al irritación de los ojos. Además, se recomiendan filtros antipolen en los coches. Si viaja en moto lo hará con casco cerrado. Finalmente, conviene evitar secar la ropa al aire libre.