Y Genaro salió de Cabeza Gorda

El Ayuntamiento de Segura de la Sierra traslada al único vecino de La Umbría de Cabeza Gorda para que se haga la prueba del corazón

No hay ahora hombre más feliz en Segura de la Sierra que Verónico Muñoz "Genaro", el único vecino del cortijo La Umbría de Cabeza Gorda. Hoy, un coche oficial del Ayuntamiento lo ha trasladado desde su casa hasta el hospital de Segura de la Sierra para completar el chequeo mensual del corazón que precisa. Ha sido necesario que el vehículo contase con cadenas, pues aún hay restos de nieve y placas de hielo en los aledaños de la vivienda.

Genaro, de 72 años, había pedido al Ayuntamiento que retirase la nieve en un trayecto de más o menos un kilómetro, desde la casa hasta el arroyo. Lo hizo con antelación aquellos días en los que un manto blanco cubrió el cortijo. María Esperanza Chinchilla, alcaldesa local, prometió que Verónico Muñoz contaría con la ayuda del equipo de Gobierno en caso de que no pudiese ir con su coche al hospital. Así ha sido. Y no es la primera vez.

"AGRADEZCO EL APOYO DE TODOS"

Muñoz ha agradecido el gesto del Ayuntamiento, y aunque le gustaría que el Gobierno local retirase la nieve en casos como el que ha vivido, alaba que "un municipal" haya velado hoy por su seguridad en el desplazamiento, ida y vuelta.

Desde que el vecino de La Umbría de Cabeza Gorda pidió auxilio en público —en redes y a través de este medio— ha recibido llamadas de particulares dispuestos a echarle una mano. "Mucha gente de Orcera me ha llamado. Agradezco el apoyo que tenido", señala en declaraciones a Lacontradejaén.

Lo más importante es la salud, dicen, y la de "Genaro" está bien. Aun sigue solo, a la espera de que su esposa, Justa Pérez, regrese de Valencia, donde atiende a sus nietos. La siguiente prueba del corazón será el mes que viene. Para entonces, augura el vecino, la nieve será historia. Podrá arrancar de su nuevo su Suzuki y ser un hombre autónomo, más libre.