Una familia con dos menores busca un alquiler social

La familia será desalojada el próximo martes, 24 de octubre, y la plataforma exige el alquiler a la entidad bancaria titular del inmueble

Drama humano a punto de consumarse. Una familia con dos menores —6 y 12 años— de Villanueva de la Reina deberá abandonar la vivienda que aún habita el próximo 24 de octubre, según informa la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) en un comunicado.

"El encargado de desalojar a la familia es el BBVA. El Ayuntamiento no tiene alternativa habitacional. La Junta de Andalucía y el Consistorio local conocen la situación de desamparo y falta de recursos de Olga Fernández, su pareja y sus dos hijos menores", expone el colectivo.

LA HISTORIA DE LA CASA Y DE FAMILIA

Fernández vivía en el año 2009 de alquiler en la vivienda. Según expone la plataforma, todo iba bien hasta que el propietario del inmueble tuvo problemas con el banco para pagar su hipoteca. Tanto fue así que se vio obligado a renunciar a la casa, que pasó a ser propiedad de la entidad bancaria.

En el año 2014, el nuevo titular cambió la cerradura de la vivienda cuando la familia estaba fuera, de modo que más tarde la ocupó ilegalmente. Era el único recurso que les quedaba.

“Desde entonces no han dejado de pedirle a la entidad un alquiler social para vivir dignamente con sus hijos y sin miedo a ser desalojados”, recuerda Ana Cárdenas, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.

LA POSICIÓN DE LA PLATAFORMA

“No podemos consentirlo. Olga no tiene trabajo y no percibe ninguna prestación contributiva: carece de recursos económicos suficientes para afrontar cualquier tipo de contrato de arrendamiento", especifica el colectivo, que es partidario de una solución habitacional dada la carestía que rodea a la familia villanovera. Sostiene que los requisitos que piden los arrendadores descartan las opciones de Fernández y los suyos.

AYUDA A LAS ADMINISTRACIONES

La PAH ha pedido al Ayuntamiento, a la Junta y a la Diputación que medien con la entidad bancaria para evitar el desalojo. El colectivo afirma que es la única salida al drama, y que las administraciones deben contemplar casos de urgencias para mediar. "O se está con los bancos o con las familias. Es incomprensible que no sepan lograr juntas un alquiler social", concluye Cárdenas.