Vístete de ColorsTribe y baila
Miles de jóvenes disfrutan durante 10 horas de la mejor música electrónica, trap y latina en la fiesta ColorsTribe de Jaén
Entrar en el pabellón abierto de la Ifeja era sumergirse en un mar de todos los colores del que se hacía imposible salir sin la ropa coloreada y con el ritmillo metido en las piernas y en el cuello. Miles de jóvenes llegados desde casi todos los puntos de la provincia no quisieron perderse la segunda edición jiennense del festival de colores ColorsTribe y se presentaron en la institución ferial con camisetas blancas, muchas bolsas para el botellón y las ansias de que las 10 horas de conciertos se pasasen sin parar de moverse al ritmo de lo mejor de la música electrónica, latina y del trap.
La organización de la cita dispuso varios autobuses para llegar hasta la zona de escenarios, pero ni con el '13' de los urbanos de la capital había suficiente. Cundían los nervios, porque nadie quería llegar tarde, ya fuese en bus, en taxi, en su coche o a pie por el carril que la Policía Local habilitó para que los cientos de jóvenes que bajaban caminando hasta la Ifeja no tuvieran ningún percance por la carretera. Y es que Colorstribe se ha vuelto una cita imperdible después del gran éxito que cosechó la edición anterior y este año había nombres en el cartel a los que acompañan hasta sus escenarios cientos de jóvenes dispuestos a bailar y cantar hasta la extenuación los temas que escuchan a diario en YouTube o Spotify. Ni un solo momento hubo para estarse quieto, a no ser que fuera para pedir en la barra y beberse la copa.
DELLAFUENTE Y MAKA
Raúl Alcazar B2B GSUS y Luis Roca fueron los encargados de 'calentar' al público joven que llegaba en manadas hasta la zona del escenario y que desde el primer minuto tenía claro que aquello había que llenarlo de colores a base de bolsitas de polvos que repartían desde la organización en la entrada del festival. Tras la previa de los dos dj's, llegó el turno para Ikki y Denom. El productor y dj franco hispano y el rapero madrileño, que había estado en la capital hace tan solo dos semanas, repitieron éxito y arrastraron hasta el escenario a los jóvenes que querían hacerle los coros al rapero sin pelos en la lengua, que volvió a dejárselo todo sobre el escenario y caldeó el ambiente para lo que venía después, uno de los conciertos más esperados por los más jóvenes, gorra en cabeza, para levantar las manos y ponerse a cantar entre el rap de autotune y los quejíos del duo granadino.
Si algo tienen Dellafuente y Maka es que llevan consigo una legión de fieles seguidores a los que las letras del 'Chino', como llaman a Dellafuente, se le quedan "clavadas". Y la voz flamenca de Maka. Tienen duende. Por eso, cuando salió al escenario con la camiseta de su Dellafuente F.C se hizo el silencio. Hasta que comenzó a sonar Dile y miles de personas les hicieron los coros durante una hora en la que hicieron gala del nombre de su gira 'Quejíos y Autotune' y recrearon en directo lo que tantas veces los jiennenses habían vivido virtualmente, con temas como Consentía o Pa que quieres el dinero, La vida es. Un espectáculo de ritmos flamencos, electrónicos y latinos que bailaban al mismo son los jóvenes a los que ya no les quedaba ni una parte del cuerpo sin colorear.
DALE ELECTRÓNICA
Una vez los granadinos se retiraron del escenario llegó el turno de Ramy, Keymass y Bonche, que consiguieron que el ambiente caldeado no decayera ni un segundo a ritmo de música electrónica y reggaetón, antes de que llegase el turno de Dasoul. El cantante canario de música latina comercial interpretó en directo algunos de sus temas más conocidos como 'Todas las promesas' y logró mantener el ambiente latino y el 'perreo' hasta que comenzó a sonar una de las residentes del festival, Lara Taylor, quien repetía cita y cosechó el mismo éxito que en la edición anterior, en la que se reunieron alrededor de 10.000 personas.
Ya eran alrededor de las 21:00 horas y los jóvenes no dejaban de bailar y entrar y salir para hacer botellón en los olivares aledaños a la Ifeja, aunque pocos quisieron perderse a Carlos Jean y su música electrónica. Después llegó la sorpresa para quien no conociera a Eyes of Providence, pues se quedó sin verles la cara, no porque faltasen a la cita, sino porque salieron, como siempre, con sus dos cascos-máscaras. Su música electrónica EDM, su imagen y su puesta en escena no dejó a nadie indiferente y a todos con los pies más que cansados.
FIN DE FIESTA
Y a falta de pocas horas para el cierre del festival, se subió al escenario uno de los dúos más esperados, Wolfpack. Los belgas, con su música house y su atractiva puesta en escena lograron responder a las expectativas de los más jóvenes amantes de la música electrónica que se habían acercado allí solo para moverse a sus ritmos en directo. Después, Beauty Brain se subió al escenario y, a ritmo de trap, consiguió que los miles de asistentes se empapasen de los ritmos de los gaditanos, antes del cierre, a cargo de Luis Muriel, y que inundó la carretera de Granada de un arcoiris de jóvenes de colores que, a buen seguro, se suman a la cita de 2018.
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