Olivares, entre fantasmas en sus dos nuevos trabajos literarios

El profesor de Filología Inglesa de la Universidad edita y traduce sendas antologías centradas en la figura del espectro, dentro de la literatura en lengua inglesa

Julio Ángel Olivares es ese escritor de melena envidiable que ya quisiera para sí el mismísimo Horace Walpole, ese enigmático neorromántico que mantiene vivo en Jaén el gusto por lo gótico, por el universo espectral, por lo inquietante, que sus maestros británicos del XVIII y el XIX elevaron a categoría de género. 

En esa línea, el profesor de la Universidad de Jaén acaba de traducir y editar la obra Nueve fantasmas para el sello Diábolo Ediciones, una obra orignal de Richard Henry Malden (1879-1951) inédita hasta ahora en España.

Se trata de una colección de relatos que, en palabras del traductor, representa "una pieza señera y fundamental a la hora de comprender la evolución de la figura del espectro en la literatura, sobre todo a partir de las manifestaciones fantasmagóricas herederas de ínclitos autores como Le Fanu o M.R. James":

"La intimación de Malden con el fantasma es tan polisémica como turbadora y original. Es una joya por descubrir", sentencia. 

Por otra parte, en colaboración con AKAL y al alimón con el catedrático de la UNED Antonio Ballesteros, Olivares firma Fantasmas, "la antología más exhaustiva y completa de relatos espectrales correspondientes a tales décadas, la época dorada del fantasma literario, publicada hasta la fecha", aclara el profesor. 

Una colección de veintitrés relatos de autores tan representativos como Elizabeth Gaskell, Amelia Edwards, Charles Dickens, Joseph Sheridan Le Fanu, Robert Louis Stevenson, Rudyard Kipling, Bram Stoker o H. G. Wells., figuras de culto entre los amantes de la literatura fantasmagórica:

"Insignes no solo dentro del género sino en el más amplio escenario de la historia de la literatura, que presentan historias herederas de la sensibilidad y la orquestación romántica y gótica, con castillos ruinosos, desolados cementerios y bosques oscuros como telón de fondo a fin de recrear en los lectores ese temor ancestral por lo desconocido", concluye el autor.