Baeza rendirá honores al poeta áureo Alonso de Bonilla

La ciudad homenajeará al escritor del Siglo de Oro con actos y actividades en torno a su figura y obra, que incluirán la colocación de una placa conmemorativa 

Uno de los precursores del conceptismo (el movimiento literario que alcanzó con Quevedo y Gracián sus cotas más altas) fue Alonso de Bonilla, el poeta baezano de cuyo nacimiento se cumplen, en 2020, cuatrocientos cincuenta años. Una efeméride de lo más señalada que la ciudad renacentista quiere celebrar por todo lo alto, dentro de lo que la pandemia del coronavirus permita.

"A pesar de estar de estar viviendo una situación de alerta sanitaria, no podemos dejar de homenajear y poner en relevancia a este ilustre personaje de nuestra ciudad, admirado por grandes autores como Lope de Vega", explica el concejal de Patrimonio del Ayuntamiento baezano, Jorge López, a través de un vídeo difundido en las redes sociales municipales.

El autor, sepultado en la iglesia del Salvador, firmó más de dos mil composiciones y se codeó con lo más granado de la literatura de su época, por lo que Baeza no quiera dejar pasar la oportunidad de rendirle honores: Como "la maravilla octava del Parnaso" definió el Fénix de los ingenios, nada más y nada menos, a Bonilla, que además de a escribir le dio tiempo, en su intensa vida, de ejercer el oficio de platero: "De ahí que la mayor parte de su vida la pasara en la calle Calderón, lo que hoy conocemos como la calle Platería", aclara López.

La forma de celebrar esta efeméride será "a través de actos culturales, como no puede ser de otra manera, pero también dejando reconocimiento de este personaje en nuestra ciudad. Por ello, se está elaborando una placa de piedra conmemorativa que dice: La ciudad de Baeza al poeta Alonso de Bonilla y Garzón (1570-1642) en el 450 aniversario de su nacimiento y que se colocará en nuestra ciudad", asegura el concejal de Patrimonio.

Un baezano ilustre, un poeta notable que, como Machado alrededor de trescientos años después, paseó por las calles del municipio y dejó en su aire el aliento de la buena poesía.