El Carnaval de Cambil calienta motores con novedades

Nuevos premios y cambio de ubicación del epicentro de las fiestas son las principales innovaciones de este año para la celebración de Don Carnal en el municipio

Que la vida es un Carnaval lo proclamaba a los cuatro vientos la cubana Celia Cruz con una canción ya universal; tanto, que ha dado para un buen número de versiones en voz de otros artistas. Le pasa lo que a la propia fiesta de Don Carnal, que según el lugar donde se celebre presenta particularidades o coincidencias, dependiendo del gusto por mantener intacta la tradición o parecerse a los grandes focos mediáticos carnavalescos.

En Cambil han preferido la primera opción y, año tras año, sus Carnestolendas rezuman singularidad, autenticidad, sello propio: "Aquí no tenemos tradición de chirigotas ni comparsas, nuestro Carnaval es otra cosa", asegura Nacho López, concejal de Festejos del Ayuntamiento.

Sí, el 15 de febrero los cambileños se citan con su forma de entender una celebración que ha calado hondo entre los vecinos hasta el punto de contar ya con un espacio a la medida en las hojas del calendario festivo local. Carrozas, chanza, buen humor, música... De todo tiene esta cita con los disfraces que, cada 15 de febrero, pone en modo divertido hasta al más serio de los habitantes del municipio.

Para calentar motores, la administración local convocó a los vecinos más guasones, el pasado viernes, a una reunión en la que se pusieron sobre la mesa propuestas, ideas y proyectos con vistas a que la celebración de 2020 se supere en originalidad y en calidad.

"Este año tendremos novedades", adelanta López. Se refiere, entre otras innovaciones, al cambio de ubicación del escenario de las fiestas, que se traslada al Parque Municipal, donde el Ayuntamiento instalará una carpa para que ni una gota de lluvia agüe la fiesta al personal. Un DJ hará mover los cuerpos para que el ambiente se mantenga cálido.

El edil de Festejos aclara, además, que todas las carrozas con más de diez personas se repartirán la nada despreciable cantidad de seiscientos euros, una buena recompensa al esfuerzo que, Carnaval a Carnaval, realizan los cambileños para impresionar con sus espectaculares montajes. 

Se mantienen, eso sí, los premios a los disfraces individuales, con cantidades que oscilan entre los cuarenta, los sesenta y los veinte euros, que irán a parar a los bolsillos de quienes más se lo curren a la hora de enmascararse con maestría. 

En nombre de su pueblo, Nacho López invita a visitantes y enamorados de Don Carnal a pasarse por Cambil y disfrutar de la celebración "en el mejor ambiente".