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Día 7: A fuego lento

Por Alejandra McKelligan. - Marzo 22, 2020
Día 7: A fuego lento
Frijol con carne de cerdo. Foto: Cedida.

Hace varios días que mis queridos lectores estáis pidiendo recetas de cocina y hoy os voy a compartir algunas de las que más estamos disfrutando mi hijo y yo en estos días.

Recuerdo perfectamente el día que compré mi primera olla de presión —olla exprés, para los que me leen en México—. ¡Me puse tan contenta! Porque en aquel entonces, estaba tan estresada conciliando vida laboral con vida familiar, que esta herramienta se iba a convertir en mi mejor aliada puesto que podría hacer la comida de forma rápida, pero manteniendo la textura suave que todos en casa queríamos. 

Ahora, desde que estamos guardados en casa tenemos todo el tiempo del mundo para cocinar 3 tipos de platos: los que son elaborados, los que habitualmente cocinas en olla de presión por practicidad, pero sabes que si los hicieras a fuego lento te quedarían más buenos y los que te recuerdan a tu abuela o a tu lugar de origen, en mi caso, mi querida comida mexicana que pocas veces tengo tiempo de cocinar.

En esta época, el tiempo pasa más despacio, no tenemos prisa, no importa cuantas horas pasemos en la cocina, la prisa ya no es un obstáculo y si quieres que te confiese algo, para mí la cocina siempre ha sido terapéutica, no sé, me conecta con la creatividad y el momento presente. Me gusta lavar despacio los ingredientes y disfrutar desde el día de antes pensando con qué plato voy a sorprender a mi hijo para que cuando lo probemos todo sea una fiesta culinaria tan agradable, que por la boca solo pueda salir este canto: “mmmhhh…”

Bueno, te voy a compartir una receta de un plato mexicano con el que hemos disfrutado mucho puesto que hice mucha cantidad ya que nos encanta, así que tuvimos para varios días. 

Por cierto, éste es un buen truco si eres de los que le gusta cocinar poco, si haces mucha cantidad, luego puedes guardar o congelar y cuando lo necesites ya solo calentar. Bueno, aquí te dejo la receta:

Judías negras con Arroz, en México los llamamos: Frijoles Charros

Ingredientes:

-150 gramos de frijoles/judías/alubias/habichuelas negras
-1 tomate cortado en cuadritos pequeños
-1 cebolla cortada en cuadritos pequeños
-2 dientes de ajo cortados en cuadritos pequeños
-1 paquete de Bacon y si no tienes, pues con panceta queda genial
-Cilantro, 1/3 del paquete y si no tienes, prueba con perejil
-Arroz (largo) 
-Un poquito de guindilla, si no te gusta el picante, lo omites y listo
-Sal al gusto

El día de antes a la comida, se ponen las judías/alubias/habichuelas en remojo y luego al día siguiente se cocinan a fuego lento con cebolla, ajo y un poco de sal. Su cocción puede llegar a tardar alrededor de 3 horas, pero mientras tanto te da para leer un libro, hacer algunos estiramientos mientras escuchas música de fondo en plan animado o de relajación, según tu estado de ánimo y puedes ir cortando todos los demás ingredientes y tenerlo todo a punto. Esta receta es muy sencilla, pero si en casa tienes estos ingredientes verás que buenas las mezclas de sabores. Una vez tienes los frijoles negros listos, los apartas y te pones con el sofrito: en una sartén ponemos aceite de oliva o girasol, en México cocinamos con este último porque tenemos más costumbre. Ahí ponemos a que sofría el Bacon o panceta y cuando esté doradito, ponemos la cebolla y el ajo, y una vez estén pochados vamos a agregar el tomate en cuadritos y vamos a esperar a que se incorpore bien con el resto y a que vaya cogiendo una textura suave (que el tomate se deshaga) y entonces ya le añadimos el cilantro cortado en trozos y la sal al gusto. Cuando éste sofrito esté listo (unos 15 minutos) se lo vamos a añadir a las judías junto con el arroz y la guindilla y vamos a dejar que haga “chup-chup” de nuevo, a fuego lento, esperando a que todos los sabores se incorporen. Cuando el arroz esté cocido, entonces ya está listo para servir. Yo este plato lo acompaño con una ensalada de tomate, cebolla, lechuga y aguacate para equilibrar con los carbohidratos, legumbres e hidratos de carbono que ya tenemos en el otro plato.

Espero que te guste, si la preparas, te pido que me escribas un comentario para saber qué te pareció. ¡Buen provecho! 

¡Te mando un abrazo frijolero!

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COMENTARIOS

Víctor Guillermo Figueroa Molina

Víctor Guillermo Figueroa Molina Marzo 26, 2020

¡Lo que son las cosas! La primera vez que llegó una olla a presión a casa de mis abuelos le tenían miedo, por si explotara. Una vez en el fuego, todos los curiosos observaban detrás de los cristales de la puerta de la cocina. Hoy echamos de menos no sólo a personas que no están (como mis abuelos), sino esos momentos que compartíamos en familia, unos al lado de los otros.

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