Cazorla, Paraíso Interior

Allá por finales de mayo (parece que ha pasado un lustro desde entonces), cuando aún nos encontrábamos en épocas de desescaladas, el futuro económico de nuestra provincia se antojaba incierto, más si cabe en el sector turístico.

El Instituto Nacional de Estadístico (INE) ha publicado los primeros datos provisionales del mes de julio en cuanto a viajeros y número de pernoctaciones, siendo histórica la caída del principal sector de la economía patria, pero… ¡sorpresa! Uno de nuestros más preciados destinos, Cazorla, no solo ha aguantado esta dichosa crisis, sino que ha mejorado sus datos respecto al mismo periodo de 2019 (algo aventurábamos: https://lacontradejaen.eldiario.es/el-turismo-en-tiempos-del-coronavirus).

Un batacazo sin precedentes

Sin duda el turismo de interior ha sido el “gran vencedor” (si es que lo hay) de esta crisis. Pero no vamos a lanzar campanas al vuelo, nos encontramos ante la mayor caída de la historia de nuestro principal motor económico (el turismo supone un 12% del PIB).

En el primer semestre España perdió 27.3 millones de viajeros, casi 30.000 millones de euros (fuente: El País), y sí, hablo solo de turismo internacional. El mes de julio era la esperanza de la recuperación del sector, primer mes sin restricciones de movilidad, pero los datos no han sido para nada los esperados: caída del 75% del turismo internacional (un 71% para el caso de Andalucía) y unas pérdidas cercanas al 80% del gasto turístico internacional.

El turismo nacional era la gran esperanza del Gobierno (y de todos), pero tampoco aguanta, arrojando un descenso cercano al 40% si comparamos los datos de julio de 2020 y 2019. Similares cifras encontramos para el caso de Andalucía, con una caída que ronda ese 40%, mejorando ligeramente en la provincia de Jaén, con un 37% menos de turistas. La temporada está perdida.

Cazorla, brotes verdes para la provincia

Sin embargo, no todo son malas noticias. En el mencionado artículo del 30 de mayo ya adelantábamos que teníamos una importante oportunidad ante esta crisis, gracias a que nuestro principal activo era el turismo rural y parece ser que así ha sido.

El turismo en Cazorla crece, aguantando esta debacle cual reducto galo. Los primeros datos arrojados por el INE muestran una gran mejoría en los primeros datos interanuales de la nueva normalidad. En concreto, un 17% más de españoles visitaron tierras cazorleñas, con un incremento del 8% de las pernoctaciones. A pesar de la lógica caída del turismo internacional, en este caso el turismo nacional sí ha respondido, incrementado el número de visitantes a la sierra en la que nace el Guadalquivir.

Lo esperado (o no), la actual situación ha hecho que el turismo huyera del otrora turismo veraniego de sol y playa, de las masificaciones y las grandes ciudades hacia pequeños pueblos, sierras, entornos rurales, Cazorla.

De acuerdo, no se trata de un enorme aumento, ni salvará la temporada turística de la provincia, pero sí que son unos pequeños brotes verdes que surgen entre tanta pesadumbre. Y es que la nueva normalidad ha brindado a uno de nuestros mayores activos una enorme oportunidad para terminar de darse a conocer al resto de España, sin duda, ahora más que nunca, Cazorla, Paraíso Interior.

Texto de SECOT Jaén