Los devotos de La Morenita viven una Romería de recogimiento

El obispo de la Diócesis de Jaén promete una "gran peregrinación diocesana" al Santuario cuando la pandemia pase y las autoridades lo permitan

"Con todos has estado y con todos has llorado cuando el virus imponía su ley, que era y es de dolor y de muerte". En la intimidad y con el recogimiento como testigo, la Basílica Menor del Santuario de la Virgen de la Cabeza ha vivido hoy un domingo de Romería muy diferente. Por segundo año consecutivo, el imponente silencio de la pandemia ha inundado el poblado que debía estar plegado de devotos llegados desde todos los puntos de España. Los mismos que desde sus casas y con el máximo respeto han vivido la bautizada como "no Romería".

El obispo de la Diócesis de Jaén, Amadeo Rodríguez Magro, no ha faltado a la tradición y en su homilía ha hecho un llamamiento a una futura peregrinación multitudinaria, cuando el coronavirus lo permita. "Queridos hermanos y hermanas, querido fieles hijos de María Santísima de la Cabeza. Siento que la Virgen me pide que os diga que no echéis en saco roto todo lo que nos está enseñando este tiempo de pandemia", ha dicho. 

Abandonando las líneas que tenía preparadas, el obispo de la Diócesis de Jaén le ha hecho una promesa a la Reina de Sierra Morena: "Te prometo que cuando la pandemia nos abandone y las autoridades nos permitan movernos sin peligro, vendremos a este Santuario en una gran peregrinación diocesana a darte las gracias". Sus palabras han arrnacado un sonoro aplauso entre los asistentes. 

Amadeo Rodríguez ha ensalzado la caridad que ha reinado en el corazón de los devotos durante estos duros y largos meses. Ha aplaudido que haya prevalecido por encima de los individualismos. No se ha olvidado de esos miles y miles de héroes anónimos que han dejado cuerpo y alma por cuidar y velar por los demás. "La  Virgen se ha unido a los aplausos y oraciones y les ha reconocido, también Ella, como los héroes de una batalla cruenta con un enemigo descontrolado". 

No se ha olvidado, tampoco, de aquellos que han mostrado "irresponsabilidad". "¿Cómo decirles que un mundo que ha experimentado un mal que nos ha hechos a todos igualmente vulnerables y frágiles, necesita ahora de la solidaridad de todos en la defensa común de lo que nos perjudica y daña?", se ha preguntado.

Las palabras del Obispo de Jaén han resonado dentro del templo ante la presencia de unos pocos privilegiados. Fuera, el Santuario desértico y mojado por las gotas de la borrasca Lola. En cada uno de los hogares de los devotos se ha seguido la retransmisión de Canal Sur, que se ha convertido en tendencia nacional en las redes sociales. 

Cada ciudadano ha vivido, a su manera, estos cuatro días de Romería y a pesar del temor existente por las autoridades, ha cumplido con los mandamientos que desde hace meses rigen la vida de los ciudadanos, al amparo del virus. Todos ellos aguardan a que llegue abril de 2022.