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El refugio de los sin cine

Por Fran Cano - Octubre 15, 2017
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El refugio de los sin cine
'El refugio de los sin cine' aborda la realidad de los jiennenses que viven en municipios sin salas. En la imagen, el anfiteatro del Cinema España de Frailes, en 2013. Foto: Fran Cano

A los jiennenses que vivimos en municipios sin cine sólo nos queda las plataformas de internet para estar en contacto con el séptimo arte

Lo que más extraño de aquellos días de Universidad es el cine. Las salas. No tanto las palomitas ni la gente que habla ni los padres que les explican a su hijo qué significa el comienzo de Up mientras comienza Up. Era la atmósfera, con la oscuridad y la pantalla gigante. El silencio. El ambiente de fe.

Toda esa literatura la he perdido porque vivo en uno de los tantos municipios de Jaén donde no hay más cine que el que itinera en verano con una programación desfasada, en diferido. No tengo cine en el pueblo. Tampoco en el pueblo más grande a doce kilómetros. Los más cercanos están a dos horas en coche, ida y vuelta. Así es más difícil.

Sólo me queda internet y la posibilidad de suscribirme a esas plataformas digitales que permiten que la tele curva de 49 pulgadas en el salón simule que estoy en el cine. Gracias Filmin, por las películas que no vería ni robándolas en la red. Gracias HBO, por tantas historias y sobre todo por A dos metros bajo tierra.

La tele es el refugio de los que somos ciudadanos sin cine. Intentaba hacérselo ver hace poco a José Chica, presidente de Foco Henri Langlois, mientras él me comentaba lo imposible en nuestra provincia: traer cultura de calidad al centro de Jaén con la percha genial del séptimo arte. Están cabreados, dolidos, pero yo confío en que sigan remando. Merece tanto la pena.

Los sin cine a veces nos quitamos la etiqueta, cuando cogemos un autobús para ir a un centro comercial, porque en el centro de la ciudad el cine es un recuerdo; cuando nos vamos a la capital vecina y compramos la entrada para darnos cita con la pantalla enorme. Allí están aún padres que llevan a sus hijos. La última vez que fui con los míos los invité yo. Estábamos fuera. En Salamanca.

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