El compás de espera de la sierra

Primer estudio para poner en riego la presa de Siles y beneficiar a nueve municipios. UPA Jaén cuantifica en más de 12.000 hectáreas la superficie potencialmente regable

La presa de Siles es, como el tranvía, un proyecto de idas y de venidas. De tiras y aflojas entre administraciones de distinto color político. El embalse tiene 30,5 hectómetros cúbicos de capacidad. Permitiría, en condiciona, satisfacer las necesidades de municipios deficitarios, como Beas de Segura, Benatae, Génave, Puente de Génave, Segura de la Sierra, Torres de Albánchez. Abarca una población aproximada de 13.000 habitantes. Y sin embargo, ahí sigue. Tras ser inaugurada por la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, se llenó y luego se vació sin que nade hiciera nada. Hoy, sus reservas son del 21,55% y la Diputación y UPA Jaén buscan dar un nuevo paso para intentar su puesta en funcionamiento.

UPA Jaén ha presentado el proyecto técnico de puesta en riego de la comarca de la Sierra de Segura desde la potencialidad de la presa de Siles. Una infraestructura que va a cumplir tres años de una "falsa inauguración", porque "no está puesta en servicio y porque su objetivo fundamental, que era el regadío del olivar de la zona no se está cumpliendo", tal y como ha expuesto el Secretario General de UPA Jaén, Cristóbal Cano, en la presentación del documento. Se ha hecho en la Diputación, junto con el presidente, Francisco Reyes, ya que la administración provincial ha financiado parte del mismo.

Datos recabados de comunidades de regantes, agricultores y ayuntamientos de la comarca con el que se ha elaborado un estudio que delimita las zonas regables de nueve términos municipales: Arroyo del Ojanco, Puente de Génave, Génave, La Puerta de Segura, Benatae, Orcera, Torres de Albanchez, Siles y Segura de la Sierra.

Según UPA, el estudio demuestra que, a día de hoy, ya existe una demanda declarada por los agricultores de la comarca de más de 8.000 hectáreas, muy superior a las 3.500 que recoge el Plan Hidrológico. Un dato demostrativo de que se pueden superar fácilmente las 10.000 hectáreas, alcanzando una superficie potencialmente regable de más de 12.000 hectáreas, y de que existe demanda de riego en la comarca.

Reyes ha hecho hincapié en la importancia del funcionamiento de la presa, "que es un proyecto fundamental para una parte importante de la provincia de Jaén". "Una parte que es la que más necesita del apoyo y de la inversión y de la solidaridad del resto de Andalucía y de España, esto es, la Sierra de Segura", ha subrayado. También ha puesto de manifiesto la necesidad de la puesta en regadío de la misma para favorecer el desarrollo económico de esta comarca y el mantenimiento de la población en esta zona de la provincia jiennense. “No podemos renunciar a la puesta en regadío de 10.000 hectáreas, que era el objetivo inicial de la presa, y necesitamos esos 15 hectómetros que en principio iban destinados a riego en la comarca de la Sierra de Segura, una comarca que tiene problemas de despoblación y que tiene la amenaza del abandono de tierras al retirarse las ayudas del olivar en pendiente”, ha señalado.

ESTUDIO

Está basado en la potencialidad de los 15 hectómetros cúbicos destinados originariamente para regadío. Según Cano, se ha tenido en cuenta  el medio físico de la comarca, las diferentes cotas sobre la presa y el río, y las demandas reales de agricultores que llevan unos meses constituyendo comunidades de regantes y expresando su voluntad firme de poner parcelas en regadío. "Hablamos de datos reales, con personas detrás. Porque lo que hay que tener en cuenta es que hay personas, familias que dependen fundamentalmente de la agricultura en una comarca con pocas opciones más. Por eso mismo, estaremos muy vigilantes para que los recursos se queden en la zona y no se dirija ese agua a otros lugares, porque es objetivo fundamental de la presa de Siles es poner en regadío el olivar de la comarca. Un ejemplo más de nuestro trabajo, ya que somos la Organización de los regantes de la provincia de Jaén, al representar a más de 30.000 hectáreas de regadío y 150 comunidades", añade Cristóbal Cano.