La cuadrilla castillera que siempre acaba la recogida a finales de marzo

María del Carmen Gallardo es parte de la cuadrilla de Castillo de Locubín que recoge cerca de 400.000 kilos de aceituna entre noviembre y marzo incluidos

"Es la hora de echar el cohete". Así resume María del Carmen Gallardo el fin de la campaña oleícola en Castillo de Locubín. Fue ayer, al borde del inicio de abril cuando ella y sus nueve compañeros pusieron fin a una tarea que comenzó a principios de noviembre. El resultado, cerca de 400.000 kilos de aceituna.

"Todos los años empezamos las primeras y acabamos las últimas", señala Gallardo en conversación con este periódico. Ella lleva en la cuadrilal desde el año 1994. Es la más veterana junto con Érika Castillo. También acumula ya campañas Inmaculada Lara. El resto del equipo lo integran Conchi Gutiérrez, Esperanza Delgado, María del Carmen Pérez, José Manuel Ruiz, Antonio Anguita, Miguel Ángel Garrido, que es el nuevo encargado, y Manolo Montoya. Aclaran que sólo se han quitado la mascarilla para el almuerzo y así han aprovecho para la fotografía que ilustra la información.

La de este año tuvo una incidencia que se resolvió sin males mayores. María del Carmen Gallardo enfermó de coronavirus en enero y estuvo un tiempo convaleciente hasta que se recuperó. "No lo pillé en el tajo y recuerdo que llovió los días que estuve mala, así que nadie más se contagió", manifiesta.

La cuadrilla trabaja sólo en parte de la propiedad de los dueños, que suelen recoger en torno a tres millones de kilos con los terrenos que también tienen en la provincia de Córdoba. El buen ambiente reina entre las jornaleras y los jornaleros de Castillo de Locubín. Algunas, como Inmaculada Lara, también faenan con la cereza. 

Ayer el grupo celebró el remate con unas bandejas de comida y el deseo con vistas a la próxima campaña es el de siempre, que Gallardo y el resto sigan siendo la cuadrilla que más pronto empieza y más tarde acaba la recolecta en Castillo de Locubín.