Cinco años para medir el ruido de la puerta del garaje

El Defensor del Pueblo Andaluz recomienda al Ayuntamiento de Lahiguera que practique ya la medición acústica de una puerta de garaje que origina ruidos y vibraciones en una vivienda

Medir el ruido que hace la puerta de un garaje al abrirse puede convertirse en toda una odisea para la persona que sufre los altos niveles. Es lo que pasa en Lahiguera, donde un vecino espera desde hace cinco años a que el Ayuntamiento haga una medición y determine si los niveles son excesivos o no. La situación ha llegado a tal extremo que el Defensor del Pueblo Andaluz ha tenido que intervenir en varias ocasiones.

Así, el departamento que dirige Jesús Maetzu, ha tramitado un expediente de queja en el que el interesado, un vecino de Lahiguera, denunciaba el elevado nivel de ruidos generado por la apertura y cierre de la puerta ubicada en el edificio en el que reside. Una puerta que se abre mediante un mecanismo electromecánico. No es la primera vez que se enfrenta a este problema. Por este mismo asunto ya se tramitó en su día la queja 12/2317 en la que, tras recibir respuesta del Ayuntamiento, el Defensor del Pueblo Andaluz formuló resolución de 17 de octubre de 2012 dirigida a la Alcaldía.

UNA HISTORIA QUE COMIENZA EN 2012

¿Qué es lo que pasa? En 2012. el Ayuntamiento informó de que se iba a recabar la asistencia de la Consejería de Medio Ambiente para realización de una medición acústica que determinara si los ruidos de la puerta en cuestión estaban o no por encima de los niveles permitidos. Con ello, el Defensor del Pueblo Andaluz dio por finalizada la intervención y se archivo la queja. Ahora, más de cinco años después, vuelve a estar sobre la mesa.

“A fecha actual, el Ayuntamiento de Lahiguera no ha procedido a la determinación, conocimiento y comprobación de los hechos denunciados. Ni tan siquiera, cumplir con las recomendaciones formuladas y supuestamente aceptadas. Es más, no han procedido a recabar la aludida asistencia de la Consejería de Medio Ambiente, citada en su escrito de fecha 16 de noviembre de 2012, que motiva la aceptación de la Resolución. Ni de cualquier otro, de carácter supramunicipal. Por lo que, a mi entender, tal actitud, supone, además de no reconocer el debido respeto a los derechos y deberes fundamentales regulados en el Título I de la Constitución, una falta de consideración hacia las actuaciones de las demás Instituciones del Estado y de la Comunidad Autónoma”, alerta el denunciante.

REITERADAS PETICIONES

Según el Defensor del Pueblo Andaluz, en enero, febrero, marzo y octubre de 2014 envió escritos al Ayuntamiento, además de mediante llamadas telefónicas, entre otras, en agosto y diciembre de 2014, o, por último, agosto de 2016. "La respuesta no la hemos recibido hasta el 29 de junio de 2017, esto es, casi dos años y medio después de haberla pedido por primera vez". Pero tampoco ha servido de nada. El Ayuntamiento comunicó que se uba a proceder a realizar un estudio acústico. Es decir, que dos años y medio después, la situación sigue siendo la misma.

El último caso fue a finales del año pasado, cuando el mismo afectado vuelve a comunicar a la defensoría que nada se ha hecho al respecto. Ahora, el organismo reclama, una vez más, que se haga la medición.