"Lo de la red clientelar y el voto cautivo es la excusa del perdedor"

Ángeles Férriz Gómez (La Carolina, 1978) es la cabeza de lista del PSOE Jaén al Parlamento de Andalucía. Licenciada en Derecho y abogada, ha destacado desde muy joven por sus aspiraciones políticas. Lo ha sido prácticamente todo tanto en el partido como a nivel institucional, desde vicepresidenta de la Diputación de Jaén a alcaldesa de su pueblo. Es una mujer optimista y vitalista, de eterna sonrisa e incansable trabajadora.

Presume de conocer la provincia casi como la palma de su mano. Y razón no le falta. Desde que llegó a la primera línea de la política, se la ha pateado unas cuantas veces. También porque para ella es importante conocer los problemas de los jiennenses para defenderlos como se merecen, con sus singularidades y peculiaridades. Está poniendo toda la carne en el asador para sacar el mejor resultado posible en estos comicios. Es de las que reclama "hechos, no palabras", y se remite a las conquistas logradas por su partido a lo largo de los más 37 años que lleva gobernando en Andalucía.  

—¿Qué sensaciones tiene en esta primera semana de campaña?

—Tengo muy buenas sensaciones. Como sabe, nos estamos pateando la provincia una vez más. Y digo una vez más porque nosotros no vamos a los pueblos durante los quince días de campaña, sino que lo hacemos los 365 días del año. Y, a pesar de que las elecciones sean en un mes frío, la gente está receptiva, te para por la calle, te pregunta y te dice, como debe ser, las cosas con las que no está de acuerdo. Con todo, no tengo la más mínima duda de que el PSOE volverá a ganar en la provincia, y seremos de las que más votos aporte al conjunto de Andalucía.

—¿Cuál es el haber de la gestión del PSOE al frente de la Junta de Andalucía en estos tres años y medio?

—Estos tres años y medio han sido muy duros para Andalucía en general. Ha habido una crisis muy bestia que se mantiene todavía en muchas familias. Hemos tenido que luchar contra la crisis y contra un Gobierno de derechas que no nos lo ha puesto nada fácil, porque ha hecho lo posible e imposible por machacarnos mediante los Presupuestos Generales del Estado, que han sido los peores de la historia para Jaén y para Andalucía. Tampoco ha dudado en utilizar cualquier resquicio para hostigar a nuestra tierra. El PP piensa que cuanto peor va Andalucía, mejor le irá a ellos. Una política que nos ha hecho mucho daño y ha marcado estos cuatro años. Pero, pese a ello, hemos mantenido el Estado del Bienestar. Fuimos los que lo creamos y nadie lo va a defender como nosotros. Hablamos de leyes tan importantes como la de la dependencia y la de igualdad, sin olvidar la educación o la sanidad. Quién va a querer más al Estado del Bienestar que el partido que lo creó.

Cuando peor lo estaban pasando las familias andaluzas, ahí hemos estado nosotros, manteniendo el listón en políticas sociales. Muchas veces no lo valoramos en Andalucía porque las tenemos desde hace tiempo, pero cuando subes de Despeñaperros para arriba, te das cuenta que aquí tenemos cosas que no hay en otros lugares de España. Solo por nombrarle el transporte escolar, becas y ayudas para los estudiantes, las tasas universitarias más bajas de todo el país fraccionadas en ocho pagos, centros de información a la mujer en todos los territorios... Esto a simple vista puede parecer que no tiene importancia, pero la tendría si lo perdiéramos. Pensamos que es patrimonio nuestro y de eso nada. Solo falta que venga un PP que quiere cargárselo. No solo hemos tenido que realizar un esfuerzo para mantenerlo, sino que, además, había que contrarrestar lo que nos llegaba de Madrid. Por ejemplo, la ley de dependencia. Si había que poner el 50 por ciento cada uno y ellos solo aportaban el 20, pues tuvimos que realizar un sobreesfuerzo para seguir atendiendo a estas personas.

Sobre el empleo, nadie duda de que aquí tenemos un problema al igual que en el resto de España. Lo que nunca entenderé es que el PP cada vez que habla de esto en Andalucía se le llene la boca de parados, de cifras negativas y nos dibujen un panorama negro, cuando Rajoy no hizo nada por solucionarlo. ¿Por qué no puso un plan de empleo que sí concedió a otras comunidades, como Extremadura o Canarias? Si tan mal estábamos, por qué su ministra, que era andaluza, lejos de ayudarnos lo único que hacía era machacarnos. ¿Por qué no ha puesto ni un céntimo para el Corredor Central? ¿Por qué ha quitado los Reindus, que pasaron de 22 millones a 5? No ha sido coherente su postura con Andalucía. Todo ha hecho que muchos proyectos previstos se hayan visto ralentizados porque hemos tenido que priorizar en muchas cosas.

A mí, cuando me dicen que somos los últimos, siempre respondo que no, porque, en todo este tiempo, en el Parlamento hemos aprobado una ley de discapacidad, otra de participación ciudadana, de LGTBI, de Memoria Histórica, de servicios sociales, de cambio climático... y así le puedo decir hasta treinta. Somos los primeros en derechos y los primeros que, cuando ha venido la recuperación económica, hemos ido un poquito más allá con las familias a las que hemos bonificado las matrículas de sus hijos. Es decir, hemos pensado siempre en el bienestar de los andaluces, a pesar de todos los obstáculos que nos hemos encontrado en el camino.

—Alguna autocrítica habrá.

—Claro que la hay. Nosotros nunca hemos sido un partido autocomplaciente, pero lo que no vamos a dejar es que se pinte un panorama negro, en el que no se valora el contexto en el que hemos trabajado. Claro que hay autocrítica. No nos conformamos con tener 200 centros de salud por toda la provincia. Sabemos que tenemos que mejorar y lo vamos hacer. Lo que no vamos es hacerle el juego a aquellos que desprestigian Andalucía. La sanidad funciona. Ahora bien, que hay cosas que mejorar, pues claro. Somos conscientes de que nos faltan pediatras. Yo llevo a mi niño al pediatra y si este se ha cogido una baja por enfermedad, pues tenemos un problema, pero no por ello mi hijo deja de estar atendido perfectamente.

También asumimos que las infraestructuras son una de nuestras asignaturas pendientes en la provincia. Lo que ocurre es que hubo un momento dado en esta legislatura en la que nos vimos obligados a priorizar entre unos cuantos kilómetros más de carretera o nos volcábamos con la gente que lo estaba pasando mal con planes de empleo para que pudieran respirar. Por eso, lo que nadie puede negar es que el PSOE ha estado al lado de la gente.

—Ha hablado de sanidad. ¿Usted ha comido bien en un hospital jiennense?

—Sí, perfectamente. Me hubiera gustado más comerme un potaje de mi madre, con sus avíos y sus cosas, pero me ponían una pescadita sin sal o una sopita, porque estaba de nueve meses. Llevo muchas semanas pateándome la provincia y esa misma pregunta se la he hecho a mucha gente y nadie me ha hablado mal de la comida de nuestros hospitales. Estoy convencida de que hay una campaña que está utilizando la derecha e intereses de determinados medios para acabar con el prestigio de la sanidad andaluza.

—Han surgido plataformas ciudadanas que no están demasiado contentas con las administraciones.

—Respetando mucho lo que reivindican, algunas de ellas no son precisamente angelitos. Dentro de ellas hay gente cuya labor es desprestigiar la sanidad pública completamente, y luego hay una gran mayoría que defiende lo que cree que es justo. Si hablamos de la plataforma de Linares, creo que le hacen un flaco favor a su ciudad pintando ese panorama de tierra quemada. Yo soy de otro pueblo industrial (La Carolina) que también tiene problemas y que sufre los efectos del paro, pero creo que no van por el camino correcto cuando hablan de su ciudad como un erial, porque se les puede volver en contra. No hacen de Linares un lugar atractivo para las empresas. Además, Linares no es un desastre y ni el panorama es tan negro como dicen.

—Se basan en datos. No me puede negar que la tasa de desempleo en Linares y en el eje de la Nacional IV es insostenible.

—Nadie niega eso. Claro que hay que hacer muchas cosas por Linares y por La Carolina o por Andújar. Por desgracia la crisis se ha llevado por delante muchas zonas, pero sobre todo ha golpeado con crudeza en los sitios industriales. Yo lo que digo es que hay que decir las cosas que están mal y las que están bien. Lo que me resulta curioso es que toda la carga recaiga sobre la Junta, cuando los únicos que han hecho algo por Linares han sido administraciones socialistas. Le doy un dato, en 2011, ya en crisis, en el último año del Gobierno de Zapatero, ese eje contó con una ayuda de reidustrialización de 22 millones de euros, hoy en día solo 5. Que le pregunten a las empresas de La Carolina o de Linares si esas ayudas no son importantes. Lo que no se puede decir es que no hemos hecho nada. Es injusto.

—El problema es que el malestar no solo es de Linares. En la capital, también hay otra plataforma -Jaén Merece Más- que reivindica más atención.

—Lo sé, pero lo normal es que se arremetiera contra todas las administraciones y me da la sensación de que solo van a por una. Entramos en una inercia de que todo es malo e insisto que eso no es bueno. Echo de menos que se reconozca lo que se ha hecho bien. Jaén ha contado, como Linares, con planes de empleo de la Diputación y de la Junta. Sabemos que esos planes no solucionan todo, pero han permitido respirar a las familias. 

—El Partido Popular ha prometido revertir la situación de Linares y del resto de la provincia con planes específicos. ¿Qué opina?

—Y mi pregunta es: ¿Por qué no lo han hecho durante los siete años de gobierno de Mariano Rajoy? Han tenido la oportunidad, y no lo han hecho. A nosotros nos pueden criticar esto y aquello, pero, por ejemplo, en Linares hemos hecho un Campus Científico Tecnológico y otras muchas inversiones. ¿Y ellos? El otro día también me hacía gracia Diego Cañamero -diputado de Unidos Podemos- que descubrió Cástulo. Algunos llevamos unos poquitos de años en el yacimiento. A ver si Cástulo ha salido de la nada. Hemos trabajado mucho para que sea un atractivo para Linares y eso es muy positivo. Es la línea en la que debemos seguir.

—Por ahora, la mayoría de líderes regionales y nacionales han pasado por Linares, menos Susana Díaz. ¿Se le espera por la ciudad de las minas?

—No creo que eso sea el mayor de los problemas. Irá cuando deba, pero quiero recordarle que han estado sus consejeros. Si ella tuviera algo en contra de Linares no mandaría a nadie de su Gobierno. Felipe López, sin ir más lejos, no para de ir a Linares. Lo que no puede ser es que ahora todo pase porque vaya Susana Díaz a la ciudad. Usted cree que eso es lo realmente importante, o las políticas que podamos llevar a cabo para solucionar los problemas de los ciudadanos. Y no tengo la menor duda de que la presidenta irá cuando lo considere más oportuno.

—Llevan más de 37 años en el Gobierno y necesitan otros cuatro años para...

—A todos los que repiten hasta la saciedad los de los 37 años en la Junta, lo primero que les tengo que decir es que llevamos todo ese tiempo porque los andaluces y las andaluzas han querido. Lo mismo andaluces que se echaron a la calle para reclamar una Andalucía plena, y ellos querían que fuéramos ciudadanos de segunda. La misma pregunta la podíamos hacer al contrario: ¿Por qué llevan 37 años sin gobernar en Andalucía? Las elecciones son como una examen que ellos siempre suspenden. Hasta la gente de Linares sabe que quien ha estado al lado de sus vecinos ha sido el PSOE, no el Partido Popular. Siempre. Y lo sabe también el resto de la provincia, con nuestros aciertos y nuestros errores.

Nos quedan muchas cosas por culminar. Nuestro proyecto progresista y es un bastión de la izquierda que ha mantenido lo que otros no querían, con líneas rojas innegociables. Ahora, con la recuperación económica, tendremos un respiro para poder seguir trabajando en aquellas cosas que teníamos algo más ralentizadas. 

—¿Qué piensa cuando hablan de red clientelar y voto cautivo?

—Lo he escuchado de los dos extremos, de representantes del Partido Popular y de Izquierda Unida. El voto es secreto y se deposita en una urna. Decir eso es poner en duda la capacidad de una persona para decidir y tener criterio. Lo de la red clientelar y lo del voto cautivo me parece una mala excusa del perdedor. La gente voto porque confía en el proyecto de un partido.

Hablemos de un clásico: el mundo del campo. Los agricultores y los trabajadores del campo a lo mejor tienen más motivos para votar al PSOE que al PP. Baste con recordar la PAC que negoció el PP, de la que salieron beneficiadas todas las comunidades menos Andalucía. Si le eliminas una ayuda de 300 euros a muchos pequeños y medianos agricultores y se las das a los que más tienen o te pedimos que tengas una especial sensibilidad después de dos malas campañas y no haces ni caso, qué esperar. O cuando los alcaldes solicitaron la rebaja de las peonadas y no vimos por ninguna parte al PP. Tendrán razones la gente del campo para quejarse. A lo mejor vota al PSOE porque ve que lucha por sus intereses cuando más lo necesita. El PP no solo ha machacado al sector sino que, cuando ha podido, le ha pisado la cabeza.

—¿Cuál es el enemigo electoral del PSOE, el PP, Ciudadanos, Adelante Andalucía... o el propio PSOE?

—Nosotros podemos contar lo que hemos hecho en tres año y medio. Otros no han hecho nada ni en la oposición. Qué pueden ofrecer otros, pues recurrir al barro, a los insultos, al ataque... Creo que, además, dan por hecho que van a perder, por lo que los que debemos mejorar somos nosotros con propuestas para que los andaluces y los jiennenses sigan confiando en nosotros. Medidas como ampliar la gratuidad de los libros de texto a Infantil. Nosotros prometemos cosas que podemos cumplir. Ellos hablan de 600.000 empleos o de bajar los impuestos y no se lo cree ni Casado ni el propio Moreno Bonilla. En cambio, cuando Susana Díaz propone medidas, la gente se las cree porque son posibles y ya las ha hecho realidad.

Basta con ver el programa de Mariano Rajoy y comprobar qué promesas cumplió con Andalucía. Mire la PAC que logramos en 2011 y la que después negoció el Gobierno del PP. Los papeles hablan solos. El PSOE cuenta con el aval de haber cumplido, aunque esto no signifique que no nos queden muchas cosas por hacer. Por supuesto que sí.

Lo único que han dicho los tres partidos hasta ahora -PP, Ciudadanos y Adelante Andalucía- es que van a bloquear y paralizar todo lo posible un Gobierno socialista. Sin embargo, somos los únicos que podemos dar estabilidad y seguridad desde el convencimiento que ofrecemos el mejor proyecto a los andaluces y a los jiennenses. 

—¿Confía en obtener la mayoría suficiente para no depender de otro partido?

—Nosotros hemos gobernado en Andalucía de todas las maneras posibles, lo que significa que somos capaces de dialogar y de llegar a acuerdos, siempre que los intereses de la comunidad estén por encima de los partidos. Está claro que aspiramos a seguir gobernando y ojalá sea con mayoría absoluta, pero no depende de nosotros. El PSOE se sentará con todo aquel que quiere llegar a pactos por Andalucía. No tenemos problema alguno. Sin embargo, ellos -en referencia al PP, Ciudadanos y Adelante Andalucía- ya han dicho que no quieren hablar. En este punto, se olvidan de la parálisis de 80 días que sufrimos y lo malo que fue para todos. Puedo entender que no quieran que gobierne Susana Díaz, pero que planteen alternativas. Los resultados serán los que marquen. Lo que no podemos consentir es parar de nuevo Andalucía como ocurrió hace tres años y medio. Eso es de una enorme irresponsabilidad.  

—¿Siente más presión por encabezar la lista por Jaén?

—Lo primero que siento es un enorme honor y un enorme orgullo. Estoy súper agradecida a mis compañeros por haberme dado esta oportunidad de liderar la lista. ¿Más presión? Los socialistas estamos acostumbrados a currar mucho. Puede sonar a políticamente correcto, pero es que es la pura verdad. Nos hinchamos de trabajar durante todo el año por Jaén. Ahora se nos ve más porque estamos en periodo electoral, pero en todos los pueblos que visito en campaña ya he estado, conozco sus problemas, sus demandas, sus necesidades.

—Vamos a poner a prueba sus conocimientos sobre la provincia. Hábleme de Chiclana de Segura.

—Chiclana de Segura está haciendo un gran esfuerzo por el turismo. A lo mejor la gente no lo sabe, pero tiene un término municipal muy grande, donde destaca la actividad cinegética y cuenta con que parte del Guadalmena es suyo. El alcalde, Santiago Rodríguez, le ha dado la vuelta a su pueblo. Ha sido un revulsivo. Le invito a que suba al ascensor panorámico para que pueda disfrutar como nunca antes de esta provincia.

—Y de Huesa qué sabe.

—Ángel Padilla, su alcalde, un hombre de lo más trabajador. Me gusta el equipo que hacen Huesa, Hinojares y Pozo Alcón por mejorar el turismo y por preocuparse para que sus pueblos estén bonitos. Para poder representar bien a tu provincia debes conocerla. Y esto comprende saber cuáles son los problemas de Santiago-Pontones que no se parecen en nada a los que pueden tener los vecinos de Alcalá la Real. Se imagina un alcalde como Pascual González (Santiago-Pontones) con cien pedanías a su cargo, a las que tiene que recoger la basura, ofrecer servicios y atender sus necesidades por muy pequeñas que parezcan. Sus problemas nada tienen que ver con los de Alcaudete. Conocer la provincia te hace ser sensible a sus problemas, a sus demandas. Un campo de fútbol 7 es importante en la capital, pero también en otros municipios, como Bedmar, donde el padre quiere ver a su hijos en unas instalaciones dignas.

Ir a Sevilla no significa conocer solo tu pueblo. Yo soy de La Carolina, cuya realidad es industrial. Cuando estoy allí no solo defiendo los intereses de los carolinenses, que también, sino del conjunto de los jiennenses, cada uno con sus particularidades y singularidades. Conocer la provincia te permite defenderla como ella se merece.