Los sanitarios todavía necesitan material de protección

El Gobierno recomienda a Andalucía una "mayor respuesta a las necesidades de equipos de protección" y la Junta invierte 23,3 millones de euros

Los informes por los que cada comunidad autónoma pasó a la fase uno y que en el caso de Andalucía dejó a Granada y Málaga fuera durante dos semanas, se pueden consultar desde hace días en la página web del Ministerio de Sanidad. Un documento que señala el esfuerzo que ha hecho la comunidad autónoma para optimizar sus capacidades sanitarias, reforzar su capacidad diagnóstica y detección precoz de los casos sosprechosos, y establecer un plan para aumentar la capacidad de camas en caso de que fuera necesario. Sin embargo, pone un pero. Cuenta con reservas de materiales para cubrir entre 15 y 60 días y recomienda "una mayor respuesta a las necesidades de equipos de protección individual" tanto en centros de atención primaria, sociosanitarios como en hospitales. 

Porque aunque la situación epidemiológica evolucione de forma favorable, los profesionales siguen necesitando material. De ahí que el Consejo de Gobierno haya autorizado un gasto extraordinario de 23.341.079 euros para comprar mascarillas, batas y guantes destinados a los centros sanitarios andaluces con el fin de hacer frente al Covid-19. La contratación, que realizará el Servicio Andaluz de Salud (SAS) por el procedimiento de emergencia, permitirá a los centros de atención primaria y hospitales públicos estar preparados para atender la demanda de material sanitario dirigido a la prevención, diagnóstico y tratamiento de los pacientes.

El anuncio coincide con la denuncia de UGT, que asegura que ese ha enviado una circular a los centros del Distrito Sanitario de Atención Primaria Jaén-Jaén Sur que "incita a los trabajadores a que les firmen un documento en el que se avala que han tenido a su disposición los EPIs suficientes en  cada momento de la pandemia". Según el sindicato, en la circular se les indica a estos profesionales “durante la situación de pandemia” han tenido “a su disposición” guantes, mascarillas, batas, protección ocular y que la cantidad utilizada de cada uno de ellos habrá sido en función de “las  características específicas del puesto y los escenarios de riesgo que hayan hecho necesario su uso”. 

En lo que respecta a la compra de la Junta, se abastece de batas por un montante total asciende a 1.616.000 unidades desechables no estériles, batas quirúrgicas estériles reforzadas y desechables reforzadas, que supondrán un gasto de 16.338.569 euros. Salud y Familias también adquirirá 8.850.000 mascarillas quirúrgicas y nivel dos (FFP2, KNP2 y N95) para los centros sanitarios andaluces, cuyo gasto se situará en 6.352.740 euros. Se completa con 6.000.000 unidades de guantes de nitrilo de diversas tallas por importe de 649.770 euros. 

La Consejería de Salud ha adoptado esta actuación ante la escasez de material de protección en los mercados habituales y dada la necesidad de desarrollar actuaciones inmediatas para hacer frente a las consecuencias sanitarias de la pandemia por Covid-19 en la población.

Por su parte, el Gobierno ha distribuido en los últimos días más de 3,3 millones de mascarillas quirúrgicas a través del nuevo sistema de reparto iniciado la pasada semana que combina la solicitud de cantidades concretas por parte de las regiones y el cálculo realizado por el Ministerio de Sanidad para el mantenimiento de una reserva estratégica a nivel autonómico de, al menos, cinco semanas de consumo. A Andalucía se le han enviado 500.000 piezas. La estimación de las cantidades se calcula para que las regiones puedan mantener, al menos, un stock correspondiente a cinco semanas de consumo. Esta fórmula se aplica, por el momento, a las mascarillas y se extenderá a otros materiales sanitarios en función de la demanda.

MASCARILLAS PARA LA POBLACIÓN

Mientras tanto, la parlamentaria socialista Mercedes Gámez exige a la Junta de Andalucía que facilite mascarillas a la población a través de la tarjeta sanitaria, una petición que el PSOE le viene haciendo “desde hace un mes” y que ya se está llevando a cabo en varias comunidades autónomas.