Entre una trilogía de ficción y el Carnaval

Juan Diego Segovia, polifacético autor de Arjona, descubre la primera entrega de La ley del elegido

Se llama Juan Diego Segovia (Arjona, 1984), es monitor de gimnasio, tiene un grupo de rock y un estudio de grabación, dirige una tuna y ha llevado al Teatro Falla de Cádiz dos agrupaciones en la modalidad de comparsa. El (pen)último retazo de creatividad del arjonero es La ley del elegido, primera entrega de una trilogía de ficción que ya tiene escrita.

El treintañero desprende energía cuando relata a este medio cómo se las ha ingeniado para concebir una obra extensa, que se irá desvelando poco a poco. "Ha sido un proceso de cuatro años, y ya he reescrito cada tomo dos veces", cuenta. La novela está ambientada en la actualidad, en las poblaciones de Arjona, Jaén y Andújar. El protagonista es Juande, quien asistirá al despertar de hermandades secretas y misterios relacionados con manuscritos antiguos. "El libro tiene mucho de mí, de cómo soy. Quien lo lea y me conozca, lo entenderá", dice.

FICCIÓN, SOLIDARIDAD Y MANERAS DE PUBLICAR

Su personaje favorito es Tomás, un farmaceútico que deja ver en la indumentaria el vínculo que tiene con el rock de la década los 80. "Habla sin filtros, y tiene una ironía descarada", apunta.

La primera entrega ya ha pasado por Arjona, donde vendió un centenar de ejemplares, y llegará a Jaén capital el día 28. La presentación será a las 19:00 horas en el salón de actos de Asuntos Sociales. El libro volverá a estar disponible en las librerías locales de Arjona y en otras de la capital, Andújar, Arjonilla y Jamilena. Quienes quieran comprarlo pueden hacerlo, en físico y en digital, a través de la web www.juandiegosegovia.com.

La intención del autor, que de momento apuesta por autoeditar los volúmenes, es publicar las tres entregas con una editoral cuando previamente estén todas a la venta. El arjonero donará cinco euros de cada libro que venda en Arjona el colectivo local de la Asociación Española contra el Cáncer.

LA MÚSICA, OTRA PASIÓN

Juan Diego Segovia es un amante de la música, y no tiene un género en concreto. Le gusta el rock, como al personaje de la novela, y tiene un grupo llamado Quiero Cantarte. Disfruta en su estudio de grabación, y también tiene tiempo para ser director de tuna.

El carnaval es una de sus pasiones. Líder de una agrupación, llevó al Falla a dos comparsas: Vividores en 2011 y Alcahuetes, en 2012. "Son muchas horas las que dedico a escribir", reconoce. Si no pierde el apetito, aún le quedan muchas más.