Adiós a las salidas frecuentes y las colas para comprar en Guarromán

El Ayuntamiento y los supermercados locales consensúan nuevas medidas para minimizar los riesgos de contagio de coronavirus a la hora de llenar la despensa

Adelantarse a posibles medidas más drásticas que las que están en vigor a día de hoy a causa de la pandemia de Covid-19. Ese es el objetivo que persiguen varios municipios de la provincia con determinaciones extraordinarias que, además, buscan minimizar al máximo los riesgos de contagio entre sus vecinos.

Y es que una necesidad tan básica como llenar la nevera puede ser también la excusa perfecta para estirar las piernas y aliviar un poco la pesadez de la cuarentena: "Habíamos detectado que algunas personas, con eso de salir a comprar, lo hacían dos o tres veces a la semana, en lugar de hacer una compra razonable a la semana y evitar colas, desplazamientos y masificaciones", aclara Erik Domínguez, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Guarromán. 

Siguiendo la línea de pueblos como Frailes, que adoptaron hace ya varios días, la Administración guarromanense se reunió el pasado domingo con los gerentes de los supermercados locales y acordaron "por unanimidad" que desde ayer, lunes, los establecimientos permanezcan cerrados, sin que ello suponga el desabastecimiento de la población en ningún momento. Como explica el teniente de alcalde, se han dispuesto tres sistemas de compra: "El primero es a distancia, a través del teléfono móvil o de los grupos de Wassap que se han creado con los supermercados"; en palabras de Domínguez, de esta forma los los empleados atienden el pedido y a una hora determinada avisan al cliente para que pase a recogerlo, evitando así aglomeraciones. 

Igualmente, Guarromán mantiene el servicio a domicilio con pago por tarjeta; una prestación que ya estaba activa antes de la aparición del coronavirus pero que, estos días, supone una alternativa de lo más recomendable para eludir el contacto directo con vecinos y trabajadores de las tiendas. 

"Por último está la cesta de la compra automatizada; pensando en las personas mayores, a las que les cuesta más, le hemos dado una solución muy sencilla. Ellos nos transmiten por teléfono lo que quieren del súper, incluso se les  pregunta si quieren marca u oferta; se les busca el producto, les preparamos la cesta de la compra y vamos al supermercado nosotros. En vez de recogerla en el súper, se la lleva un familiar debidamente acreditado o se le hace llegar a su propia casa", indica el responsable municipal. 

La iniciativa, según pasan las horas, es todo un éxito, si se atiende a los comentarios que, vía Wassap, exponen los usuarios: "Ayer fue un poco caótico, igual que el primer día que se declaró el confinamiento, porque preveíamos que la gente iba a salir a comprar aunque no tuviera mucha necesidad, solo para acopiar; pero hoy ya ha ido mucho mejor", sentencia Domínguez.