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Miedo e inseguridad en la Estación Linares-Baeza

Por Javier Esturillo - Abril 30, 2018
Miedo e inseguridad en la Estación Linares-Baeza
Ayuntamiento de la Estación Linares-Baeza.

La presencia de clanes dedicados a la venta de droga agita la convivencia en la pedanía. La Policía mantiene abierta la investigación y no descarta nuevas detenciones por la reyerta del sábado

"Una ciudad sin ley". Así define una vecina de la Estación Linares-Baeza la situación de una pedanía que amanecido estremecida y consternada por lo sucedido el sábado por la noche en la calle Vista Alegre, en el que cinco policías resultaron heridos de distinta consideración en un enfrentamiento con uno de los clanes que, supuestamente, dominan el tráfico de droga en el pueblo. "Hay miedo e inseguridad", denuncia otro vecino que prefiere no dar su nombre. Es una sensación generalizada que ha llevado a la alcaldesa, Mariola Aranda, a solicitar en más de una ocasión que se refuerce la presencia policial en la zona.

La convivencia en la Estación lleva tiempo agitada. Muchos residentes han optado por autoimponerse la ley del silencio para "evitar problemas". Sin embargo, no ocultan su inquietud y creen que cómo no se haga algo esto puede ir a mayores. La Policía Nacional mantiene abierto el dispositivo y no descarta nuevas detenciones. De momento, siguen en dependencias de la Comisaría el 'patriarca' del clan y uno de sus hijos, así como el resto de arrestados, a la espera de pasar a disposición judicial y su más que posible ingreso en prisión. El nuevo comisario provincial, José Miguel Amaya Tébar, se desplazó ayer hasta Linares para conocer el estado de los agentes y coordinar el operativo, en el que participa la Policía Local, que mantiene tres dotaciones en la entidad menor local.

"Son muy peligrosos", advierte un residente para definir a la turba que participó en el linchamiento de los agentes y en el posterior asalto al Hospital San Agustín para 'liberar' a uno de los arrestados, donde hubo otro enfrentamiento con la Guardia Civil, en el que también salieron mal parados varios agentes de la Benemérita desplazados desde distintos puntos de la provincia. Hace tiempo que la Policía sigue tras los pasos de los cabecillas del clan que participó en la reyerta del sábado. No en vano a sus espaldas pesan numerosas detenciones por delitos contra la Sanidad Pública.

 

 

 

 

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