Cerrar Buscador

Juan Hervás: un hijo predilecto 'que pinta mucho' en Vilches

Por Javier Cano - Marzo 25, 2023
Compartir en X @JavierC91311858
Juan Hervás: un hijo predilecto 'que pinta mucho' en Vilches
El vilcheño Juan Hervás será hijo predilecto de su pueblo natal. Foto:

El dibujante y caricaturista vilcheño será nombrado hijo predilecto de su pueblo, por el que se ha desvivido culturalmente a lo largo de su existencia

"Cuando me enteré me llevé una gran impresión, todavía no me lo creo del todo, me he quedado impactado, creía que alguien pondría pegas a mi nombramiento como hijo predilecto de Vilches, pero no. Estoy como un niño con zapatos nuevos, esto es un gran galardón, son mis raíces".

Así de emocionado está Juan Hervás García desde que supo que será condecorado, ya mismo, con la más alta distinción de su patria chica.

Nacido en 1957, sabe lo que es eso de recibir premios, que su trayectoria como dibujante y caricaturista le ha procurado una vitrina a la que hay que echarle valor para quitarle el polvo, de tantas distinciones como guarda. "Pero esto es otra cosa, esto es una grandiosidad", sentencia.

Vilcheño de toda la vida, a punto estuvo de establecerse en Madrid en su juventud, cuando más de un periódico importante de la época le prometió ficharlo; eso sí, cuando se quitase de enmedio la mili. "Al terminar, mi padre me dijo que qué iba yo a hacer en Madrid, que aquí estaría mejor; le hice caso, entré a trabajar en Coosur y ya no me moví de aqui".

¿Arrepentido de la decisión tomada, de esa querencia suya, de seguir el consejo de su progenitor? Para nada: "La balanza se equilibra cuando lo pienso, no me arrepiento de haberme quedado en mi pueblo". ¡Y lo que se lo han agradecido sus paisanos!

"Su labor divulgativa, artística y patrimonial así lo avalan, por lo que consideramos muy merecida esta distinción", afirman, rotundamente, desde el Consistorio. 

VOLCADO CON SU TIERRA

Recién salido del hospital cordobés donde ha pasado unos días superando un arrechucho, Juan Hervás se deshace en elogios hacia su tierra natal, sus vecinos, entre los que encontró hace ya algunas décadas a la que sería su esposa, María del Castillo Martínez, y donde le nacieron sus dos hijos, "que algo han pillado también de artistas".

Hasta apodo tiene, aunque poco ensolerado, nada que ver con esos sobrenombres que pasan de generación en generación sin que ni los roce el olvido. ¡Como que el suyo lo ha inaugurado él!: "Juan el de las caricaturas me llaman", comenta. Seguro que sus descendientes lo llevarán para los restos, herencia de este ya ilustre artista vilcheño cuyos méritos para tal honor pone en duda, considera insuficientes: 

"Supongo que será por una labor de conjunto, como dibujante, caricaturista y colaborador con el Ayuntamiento en todas las cosas de cultura", dice. Eso y los libros que lleva publicados, siempre con la historia como excusa (otra de sus pasiones) contada a través del fruto de sus lápices y pinceles, que desde que se jubiló aclara que son su 'huertecillo', su tarea cotidiana, lo que más le gusta.  

No en vano, su obra está repartida (literalmente, porque ha regalado caricaturas a mansalva) por un buen número de puntos de la geografía nacional. Incluso caras muy conocidas de diferentes ámbitos cuentan en sus hogares con un "Juan Hervás" colgado de sus paredes:

"Hace cuatro o cinco años fui a ver jugar al Real Madrid de baloncesto y le llevé una a cada uno de ellos; estaba Laso de entrenador", recuerda. Un deporte, el de la canasta, que si no fuera por lo que es... "A mí me gustaba mucho jugar al baloncesto, pero soy muy chiquitillo". No se puede tener todo. 

Lo que sí tiene, a espuertas, es el cariño de su gente, de todo Vilches, y palabras de gratitud para dar y repartir entre quienes mejor lo conocen y más lo aprecian: 

"Estoy enormemente agradecido a mi pueblo, porque esto es una cosa que para mí creo que es inmerecida, pero lo agradezco muchísimo, de corazón. Lo poco o mucho de vida que me quede se lo seguiré dedicando a Vilches". Ese precioso municipio del mar de olivos donde el nombre de Juan Hervás quedará grabado en letras de oro (el color del aceite bueno) por los siglos de los siglos. 

 Hervás, en una divertida fotografía, con un gran lápiz.
Hervás, en una divertida fotografía, con un gran lápiz.

He visto un error

Únete a nuestro boletín

COMENTARIOS


COMENTA CON FACEBOOK