Cuando los jueces van semanas por detrás del virus

Peal de Becerro empieza un proceso de "desescalada" tras mejorar su incidencia y que la decisión del Tribunal Supremo haya llegado tarde

Pasó de rozar los 2.000 por cada 100.000 habitantes a comenzar una desescalada progresiva de las medidas de restricción ajeno a las decisiones de los tribunales. Lo ocurrido con Peal de Becerro demuestra que la justicia va semanas por detrás del virus y que, en estos casos, su actuación sirve, como mucho, para sentar jurisprudencia.

La confusión entre los pealeños ha llegado esta semana de la mano del Tribunal Supremo. Todo se remonta al 7 de julio, cuando la Junta estimó oportuno solicitar el cierre perimetral del municipio y, por ende, de toda actividad no esencial, dada la elevada incidencia de la Covid-19. Peal de Becerro esperó más de una semana la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, con sede en Granada, que cinco días después decidió no ratificar la petición.

La decisión llegó la misma semana en la que la localidad seguía viviendo momentos complicados, con tasas que no bajaban de los mil casos por cada 100.000 habitantes. De ahí que la Junta decidiera recurrir al Tribunal Supremo. Mientras éste estudiaba el caso, Peal de Becerro ha ido recuperándose poco a poco hasta el punto que su auto coincidió con el inicio de la desescalada, al bajar la incidencia acumulada de los mil casos. 

Así, el jueves, la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo ratificó la petición de la Junta por la que se acordó el confinamiento durante una semana del municipio de Peal de Becerro por razones de salud pública para la contención del Covid-19 al considerar que la medida es “necesaria y proporcionada”. El problema es que la decisión llega tarde, cuando el municipio ya ha bajado su incidencia de 1.000 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días y ha generado tal confusión que su alcalde ha tenido que salir a la palestra a explicar lo sucedido.

"La decisión del Tribunal Supremo no afecta en nada; no van a cerrar perimetralmente el municipio ni la actividad no esencial", tuvo que aclarar David Rodríguez en un vídeo dirigido a sus vecinos. Explica que el auto sólo pretende respaldar la medida que puso encima de la mesa la Junta. 

Peal de Becerro tiene ahora una incidencia que ronda los 700 casos por cada 100.000 habitantes diagnosticados en los últimos 14 días. Por eso, ha iniciado el procesos de desescalada "cauto y precavida". Se han retomado las actividades al aire libre y a partir de mañana se irán retomando algunas de interior del Pabellón Municipal. Mañana se abre la piscina municipal con todos los protocolos necesarios.

Y mientras tanto, la Junta sigue a la espera de que los tribunales avalen, o no, su petición de establecer el toque de queda de dos de la madrugada a siete de la mañana en los municipios de más de 5.000 habitantes que tengan una incidencia superior a 1.000 casos. Nada se sabe desde el miércoles, aunque el el comité de expertos ya se curó en salud y esta semana no ha propuesto municipio alguno para que se aplique la medida.