Laura García: "No me creía la llamada de la selección andaluza de balonmano"

La juvenil del GAB Jaén Laura García Ramírez ya ha estrenado convocatoria con Andalucía y sueña con debutar en la pista

Cuenta Laura García Ramírez (Jaén, 2004), jugadora juvenil del GAB Jaén, que se le saltaron las lágrimas cuando supo que había sido convocada por la selección andaluza. "Mi entrenadora me mandó un mensaje. Yo estaba en el instituto. No pude contener la emoción y mis compañeras me preguntaban qué me pasaba", recupera en declaraciones a este periódico.

García participó en la convocatoria de las juveniles andaluzas que cerró el año, en Roquetas de Mar (Almería). Fue la única jiennense del combinado blanquiverde. "Apenas conocía a casi nadie, salvo alguna compañera a la que ya me había enfrentado, pero fue una experiencia genial", resume.

La concentración se desarrolló los días 26 y 27. El primer día las jugadoras ahondaron en la faceta ofensiva y en el segundo día tocó la parcela defensiva. "El nivel es alucinante. Casi todas eran juveniles de segundo año y se nota", dice ella, que está en su primer año de juvenil y volverá a competir en División de Honor el 9 de enero contra Córdoba.

LATERAL HABILIDOSA

Laura García ingresó en el GAB Jaén con 12 años, aproximadamente, y lo suyo con el balonmano partió de una escuela de verano. Verónica, una de sus primeras entrenadoras, la instó a probar y desde entonces mantiene un idilio con la práctica.

La jiennense participa en los laterales y se define como una jugadora que va a las acciones sin miedo —bien lo saben sus entrenadores Noelia y José Ignacio— y con facilidad para la cinta. Reconoce que tiene que mejorar en el lanzamiento desde fuera.

Ahora también entrena con el equipo sénior, donde hay jugadoras que le doblan la edad, como es el caso de la capitana, Laura Torres. "Cojo mucha experiencia junto a ella. Además me dan consejos para mis tobillos, donde he sufrido lesiones", dice.

La joven ya sueña con debutar con la selección andaluza en competición. Confía en que sea pronto. Mientras tanto disfruta junto a la familia del GAB Balonmano, un refugio especial y afectivo en la pandemia.