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Más kilómetros por Laura Luelmo

Por Esperanza Calzado - Diciembre 23, 2018
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Unas 400 personas participan en la carrera celebrada en el Bulevar para mostrar su repulsa por el asesinato de Laura Luelmo. Otras 300 lo hacen en Torredelcampo

Linares, La Carolina, Martos y, ahora, Jaén capital, por partida doble y Torredelcampo. Los actos para rechazar el miedo que sienten algunas mujeres a ir solas por la calle y sufrir una agresión se extienden por toda la geografía jiennense. Esta mañana, con la resaca del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad y bajo un sol más que agradable, unas cuatrocientas personas, según las estimaciones de la Policía Local de Jaén, han salido a hacer deporte en libertad. Lo han hecho en el Bulevar bajo el lema "Correr sin miedo y no correr por miedo”.

Los participantes han salvado una distancia de entre tres y cinco kilómetros. Aunque los tiempos y los metros han sido lo de menos. Lo importante era mostrar la repulsa por la muerte de Laura Luelmo. Durante toda la semana, el silencio se ha extendido entre los colegios e institutos con motivo de la muerte de la maestra. Se convocaron concentraciones a las puertas de instituciones, asociaciones y de todos aquellos espacios que se utilizaron para solidarizarse con Laura y mostrar la más enérgica repulsa a su asesinato. Pero donde más palpable es la rabia es a través de las redes sociales. Desde ayer son miles los mensajes de repulsa que se comparten y las instantáneas que se envían a través de WhatsApp.

En Torredelcampo, alrededor de 300 personas, muchas de ellas mujeres jóvenes, han marchado esta mañana por las calles del municipio acudiendo al llamado de la Asociación Deportiva Mueve Tu Coleta. Durante la marcha, concebida como un homenaje a la joven profesora Laura Luengo, se han coreado las ya tradicionales consignas "ni una menos, vivas nos queremos; "no es no", "no es abuso, es violación", entre otras. 


Marcha en Torredelcampo en memoria de Laura Luelmo.
Marcha en Torredelcampo en memoria de Laura Luelmo.

Han salido a la calle después de que Bernardo Montoya, el asesino confeso y presunto violador, pidiera disculpas a la familia. Lo hizo en medio de los insultos y el recuerdo de que ya es tarde para pedir perdón. Nada de lo que haga devolverá a Laura Luelmo a su vida, a sus clases, a su amigos, a su familia. El asesino confeso ha ingresado en el módulo de enfermería del centro penitenciario de Huelva. Él ha marcado un nuevo hito en la lucha de las mujeres que cada vez más alzan la voz cansadas de sentirse agredidas física y verbalmente. Agotadas de no poder caminar sin tener que mirar de reojo a quién va detrás. Exhaustas de una sociedad que no las mira con igualdad. Su lucha, continua. 

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