Cerrar Buscador

"Recurrimos al lenguaje audiovisual para reinventar el periodismo"

Por Fran Cano - Marzo 09, 2019
Compartir en X @FranCharro
"Recurrimos al lenguaje audiovisual para reinventar el periodismo"

Vuelve Magdalena Trillo Domínguez (Rute, Córdoba, 1975) a Jaén, la provincia donde, según cuenta, más aprendió de periodismo. La directora de Granada Hoy ha aceptado encantada la invitación de la Asociación de la Prensa jiennense para hablar de la mujer y del periodismo. Será entrevistada por Remedios Morente, excompañera de Redacción, en La Fábrica del Arte.

Trillo ha pasado también por Ideal Granada, por la Agencia EFE y por el gabinete de prensa de la Universidad de Granada. Es solo parte de una trayectoria que le llevó a ser la primera directora del Grupo Joly. También es subdirectora de una de las marcas periodísticas más conocidas de Andalucía. Tiene tiempo para ser profesora universitaria. A los alumnos les cuenta que esta etapa de cambios es apasionante. Atiende a Lacontradejaén para hablar del pasado, de presente y del futuro del oficio de contar las cosas.

—Su ponencia tiene un titulo diáfano: Cómo ser periodista (Mujer) y no morir en el intento. Usted lo ha conseguido.

—Estamos en ello, porque es un desafío diario. El periodismo es una de las profesiones más bonitas y apasionantes, pero también de las más exigentes. Por momentos es incluso endiablada. Siempre aludimos a la película El Día de la Marmota por lo intensa que es la actividad. Llevo más de 20 años en prensa. También soy profesora de Comunicación Periodística en la Universidad de Granada, y el hecho de estar en contacto con gente nueva, que te abre los ojos, supone un camino de ida y vuelta enriquecedor.

—¿Ha cambiado la percepción y el trato hacia la mujer reportera desde sus inicios hasta ahora?

—El sector de la prensa es uno de los ámbitos, dentro de los medios, más masculinizados y por momentos más machista. Ha sido difícil, pero creo que la situación está cambiando por completo. Las empresas de periodismo, tanto las públicas como las privadas, se han dado cuenta de que hay que contar con las mujeres y no solo en la Redacción para las secciones que siempre se han destinado a ellas. Parece que Urbanismo y Tribunales tienen que ser asumidas por un hombre. En nuestro diario lo lleva una mujer. Se están rompiendo muchos estigmas en la profesión. Incluso cuando era becaria ya notaba esa idea: los chicos hacían Local, la sección potente, y nosotras, Cultura.

Hemos avanzado y nos hemos contagiado. Hoy hay inquietud por contar con el talento femenino, pese a las dificultades. Cuando me nombraron directora, el propio presidente del Grupo Joly, José Joly, me dijo que tenía esa inquietud y que quería apostar por alguien que le diese confianza. He dejado de ser la única directora del grupo desde que Ana Vives se puso al frente de Huelva Información. Ya se está reconociendo por parte de las empresas nuestras responsabilidades. Y nosotras estamos dispuestos a asumirlas. Le cuento algo: más de una vez he intentado promocionar a mujeres. No siempre han podido. Lo digo por el asunto de la conciliación laboral. Me ha pasado cuando he intentado nombrar a una periodista jefa de Local, y ha declinado porque no se lo puede permitir. Un hombre no se lo plantea. Si destacan ellas, parece que es necesaria una conversación en casa.

—¿Cuáles son las principales ideas que trasladará en la entrevista con Remedios Morente?

—Morente propiciará una debate abierto sobre conciliación laboral, discriminación y, entre otros asuntos, cómo son los medios cuando una mujer es quien dirige, qué impacto tiene en la agenda de temas. Un estudio reciente sobre la presencia de las mujeres en el periódico confirma que el hombre predomina como experto y columnista. Según el informe, solo hay un 20 por ciento de las mujeres. En Granada Hoy es la mitad o un 60 frente a un 40 por ciento.

"LOS TEMAS Y LAS PERCEPCIONES VARÍAN EN FUNCIÓN DE CADA PROVINCIA"

—Alfonso Alba, compañero de Cordópolis, sostiene que las capitales de Andalucía somos una suerte de ciudades Estado. ¿Cree que la gente de Granada se interesa por Jaén y al contrario?

—Creo que no. Hay una situación en Andalucía que viene muy de lejos. Somos reinos de taifas, sí. Ha influido la cuestión política, con el agravio estratégico y electoral entre provincias desde la política. Hay un dato interesante: ningún periódico se ha puesto en marcha con un concepto regional. Podemos recordar el caso de El Correo de Andalucía, que nació con esa idea, como el Canal Sur de la prensa. Aquí no hay una realidad periodística que cubra desde Almería hasta Huelva. El Grupo Joly nació en Cádiz y el planteamiento no fue un periódico para todas, sino una cabecera para cada provincia. Se ha entendido que los temas y la percepciones varían en función de cada provincia. Desde que me nombraron subdirectora del Grupo Joly paso la mitad de la semana en Granada y la otra, en Sevilla. Le aseguro que se ve todo muy diferente.

 Susana Díaz entrega a Trillo el premio Meridiana.
Susana Díaz entrega a Trillo el premio Meridiana.

—¿Y los periodistas de provincia miramos la realidad más allá de la nuestra?

—Yo estoy abriendo los ojos, pero sí es cierto que somos bastante egocéntricos y nos debemos a nuestras propias fuentes. Siempre se lo digo a mis alumnos: 'Ojo, que no escribís para vuestras fuentes'. A veces perdemos la perspectiva, y parece que escribes para un sector y no para el resto de la sociedad. Creo que internet y las redes lo han cambiado. El control y el papel de los medios como prescriptores de los temas informativos se está diluyendo, y estamos más sujetos a ver cuáles son los intereses de los ciudadanos que a lo que entendemos por noticia. Cuántas veces tenemos que mirar a Twitter o a Facebook para decir 'aquí hay una noticia'.

—Los intereses del público le han ganado la partida al interés público.

—Exactamente.

"AHORA SOMOS CIEN POR CIEN DIGITALES"

—Ustedes, en Granada Hoy, combinan el papel y la versión digital. ¿Hay Redacciones autónomas?

—Desde el verano pasado iniciamos el proyecto de transformación en las nueve cabeceras del grupo. Ahora somos cien por cien digitales. Lo primero es internet y las redes, y luego hacemos la edición de papel. No hay un equipo que se dedique en exclusiva al papel. Otro modelo es que cuenta con grupo para la Redacción digital y con otro, más pequeño, para la versión impresa. Lo hizo El País, pero no era factible. Nosotros hemos llegado más tarde al proceso, pero hemos aprendido de errores ajenos. Somos cien por cien digitales y seguimos cuidando la edición de papel, pero con los mismos redactores, y cada cual se hace responsable de su publicación en todas direcciones. Es decir, hay un responsable de cada información más allá del soporte.

—¿El papel sigue siendo un símbolo de calidad para un periódico o uno de resistencia?

—Sigo creyendo en el papel. Y no es solo un símbolo de resistencia. En esta era de bulos y noticias falsas, la credibilidad está del lado de los medios que tienen trayectoria y que están en los quioscos. The New York Times logró el récord de suscriptores de la edición de papel en plena era Trump. Es un medio de garantía. Este desprestigio nos ha puesto las pilas a los medios tradicionales, y ahora ha conseguido un efecto rebote: el público confía en cabeceras con trayectoria.

—Las redes sociales ya llevan tiempo en nuestra profesión. ¿Cree que los medios se están diferenciando lo suficiente?

—Hay datos al respecto, y la gente cada vez se informa más a través de plataformas como Flipboard. Facebook ahora está perdiendo usuarios. En cambio, Instagram está creciendo. Y Twitter se queda más en los circuitos de políticos y periodistas. La gente sí mira quién está detrás de cada información. Es común el comentario 'me lo han pasado por WhatsApp', pero al final el lector sí mira quién firma la información. El mayor desafío que tenemos es la batalla contra los grandes gigantes tecnológicos, como Google. Ahora hay una estrategia y actitud muy proactivas: nos hemos dado cuenta de que en ese espacio debemos estar y competir. Y soy optimista.

"JAÉN ES LA CIUDAD DONDE MÁS APRENDÍ SOBRE EL OFICIO"

—Entre tanta incertidumbre, ¿el oficio se vuelve más apasionante?

—Estamos en uno de los momentos de mayor revolución y transformación sobre el concepto y la esencia de los medios. En prensa hablamos de la tormenta perfecta, porque nos pilló la crisis económica, la tecnológica y la propia crisis del papel, que no es sostenible. Y sin embargo hemos dado un salto real y contamos con la estrategia y los recursos para ocupar espacio en nuestros entornos. Se habla, por ejemplo, del entorno transmedia, con las tecnologías 3D y de 360 grados o las posibilidades que ofrece la cultura gaming. Yo comparo la era actual con la irrupción del Nuevo Periodismo en los años 60. Ahora en vez de utilizar las herramientas de la literatura, recurrimos al lenguaje audiovisual para volver a reinventar el oficio. Tenemos la posibilidad de contar con nuevos formatos y con mayor actividad. Es un momento apasionante.

—¿Qué recuerda de aquel año que trabajó en Jaén?

—Si le digo la verdad, es el lugar donde más periodismo he aprendido. Llegué un 1 de agosto a la estación de autobuses de Jaén. No conocía a nadie, y un mes después estaba integrada. El respaldo de la Redacción fue tremendo. Aprendí de Remedios Morente lo que es hacer periodismo de verdad, y lo que es hacer historias que son valoradas por la gente. También aprendí a rectificar y asumir los errores. Jaén ha sido una de las mejores cosas que me han ocurrido.

He visto un error

Únete a nuestro boletín

COMENTARIOS


COMENTA CON FACEBOOK