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"Mis padres siguen con la lucha tras superar el coronavirus"

Por Fran Cano - Abril 08, 2020
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"Mis padres siguen con la lucha tras superar el coronavirus"
Dolores Castillo y Francisco Molina, el matrimonio que ha superado el Covid-19.

El castillero Javier Molina narra la experiencia de nervios y desasosiego vivida después de que sus padres, octogenarios, hayan superado el Covid-19

"La salud de mis padres aún es delicada: la lucha sigue". La voz de Javier Molina, empresario agroalimentario de Castillo de Locubín, todavía es la de un hombre en guardia: sus padres octogenarios, Francisco Molina y Dolores Castillo, ya no tienen coronavirus y han vuelto al pueblo, pero aún necesitan cuidados. "Deben recuperarse física y emocionalmente", dice el menor de los seis hijos.

Francisco Molina tiene 85 años y supo que tenía coronavirus el pasado 17 de marzo. Convaleciente de una operación en el Hospital Virgen de las Nieves de Granada, Molina fue sometido al test del Covid-19 en torno a las 12:40 horas de aquel día, según recuerda de memoria su hijo Javier. A las 15:30 el padre tenía luz verde para regresar a Castillo, donde lo esperaba Dolores "La Castellana", como la conocen en el pueblo. A las 22:00 Javier Molina recibió una llamada del hospital granadino: su padre había dado positivo en la prueba coronavirus. "Pasamos a vivir una película. Estábamos muy nerviosos", relata a Lacontradejaén.

Los seis hijos del matrimonio han vivido quince días confinados. Y en las escasas horas que el padre estuvo en el domicilio, la esposa, de 88 años, también contrajo el coronavirus. Apenas mediaron "cuatro o cinco días" entre los ingresos del hombre y de la mujer. Ambos han recibido atenciones en el Hospital de Alta Resolución de Alcalá la Real. "Mi madre ha vuelto sana al pueblo más tarde", admite Javier Molina.

La preocupación del hijo queda patente, porque el padre venía de una operación complicada, aparte de sufrir patologías. "Para ellos ha sido muy duro. Por eso digo que ahora están desorientados y necesitan apoyo de todo tipo", abunda. Javier Molina difunde en redes y en aplicaciones de mensajería un vídeo de media hora de duración donde frente a la cámara relata el estrés vivido y alaba la figura de los sanitarios, merecedores de "todos los aplausos". Y alude a la responsabilidad que han tenido él y sus hermanos con el resto de vecinos de Castillo, tal y como pedía semanas atrás Cristóbal Rodríguez, alcalde del municipio.

El castillero ha querido también rendir un homenaje al padre, que estuvo más tiempo solo e indefenso, dado que las medidas para los familiares de contagiados siguen la directriz del aislamiento. Francisco Molina y Dolores Castillo tienen once nietos. "Somos muchos", admite Javier. Uno de los sobrinos ha celebrado la recuperación del matrimonio publicando la imagen que ilustra el texto. Ya por fin los mayores dieron negativo en Covid-19. Tienen vida por detrás y acaban de enfrentar los efectos de una pandemia para tener también tiempo por delante. Están en ello.

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