No hay barreras para Valeria

Valeria Galdón, alumna de once años del colegio Nuestra Señora de la Encarnación de Peal de Becerro que sufre ceguera, recibe el aplauso de la comunidad educativa por su "valentía y afán de superación”

Valeria Galdón perdió la vista cuando solo tenía cinco años. Era muy pequeña. Lejos de sentirse mal, la inquieta Valeria lo afrontó como un reto.  Quería ser como el resto de sus compañeras de clase. Ese afán de superación le ha permitido superar los obstáculos, siempre apoyada por su familia y por la comunidad educativa que conforma el colegio Nuestra Señora de la Encarnación de Peal de Becerro. 

Este curso, la Delegación de Educación, el centro, la ONCE y sus compañeros y compañeras han querido realizarle un reconocimiento como agradecimiento y elogio a su paso por el centro, ya que el año que viene iniciará sus estudios de Secundaria en el instituto. "Es muy bonito poder compartir este momento con Valeria, una alumna que tanto nos proporciona y enseña. Valeria representa a todo el alumnado con diversidad funcional que alcanza sus sueños gracias a su esfuerzo, afán de superación y valentía, a pesar de las barreras que su diversidad funcional les impone. Son verdaderos ejemplos de los que todos tenemos que aprender. Desbordan fortaleza, entereza, alegría y vitalidad cuando se enfrentan a las retos que nos plantea la vida”, manifiesta la delegada de Educación, Yolanda Caballero.

En este caso, Valeria Galdón ha vencido a su diversidad funcional, en gran parte por la implicación de su familia, para que su integración en el mundo sea total y completa. En esa labor ha influido también la atención especializada de los profesionales de la Delegación de Educación y de la ONCE, que colaboran desde hace años para prestar atención educativa al alumnado con discapacidad visual a través de recursos humanos y materiales como monitores especializados, ordenadores adaptados al Braille, máquina de escritura de Braille, material bibliográfico, vídeos audiodescritos o materiales didácticos tridimensionales.

COLABORACIÓN CON LA ONCE

La delegada ha continuado detallando que la Consejería y la ONCE llevan colaborando desde 1987, a través de sucesivos convenios, con el objetivo de garantizar todos los recursos necesarios para que el alumnado con discapacidad visual avance hacia una integración real. En concreto, los 19 profesionales del equipo específico de atención al alumnado con discapacidad visual de la Delegación de Educación y la ONCE, que trabajan codo con codo, atenderán este curso a 103 alumnos y alumnas en las diferentes etapas educativas para potenciar su autonomía personal, el aprendizaje del Braille, fomentar su inclusión y reforzar las tareas de aprendizaje en las diversas materias, tecnologías de la información, idiomas, etcétera.

Caballero Aceituno ha apuntado a su vez: “Este curso también se ha puesto en marcha un proyecto precioso, ‘MusIntegrate-Linares’ con el que el Conservatorio de Linares se une a la idea del de Lucena para facilitar la inclusión en las enseñanzas musicales al alumnado con necesidades específicas de apoyo con un lema que tiene que abrir nuestros ojos, Me dio luz un invidente”.

En este sentido, la colaboración entre la comunidad educativa y la ONCE, sumada al estímulo constante de la familia por su formación integral y a la iniciativa personal de Valeria, ha conseguido que curse sus estudios a un ritmo incluso superior al de su clase y que, actualmente, esté cursando segundo de piano en el Conservatorio de Cazorla, estudiando clarinete en la escuela municipal de Peal de Becerro y que toque el cajón flamenco en el coro rociero infantil “Oro Verde” de su municipio.

“Ahora que se habla tanto de inclusión, ejemplos como el de Valeria, nos muestran que la colaboración entre agentes sociales y la comunidad educativa proporciona al alumnado igualdad de oportunidades y, de esta forma, se avanza hacia una inclusión real y efectiva”, ha concluido Yolanda Caballero.