Los madridistas cambileños 'meten un gol' al coronavirus

La peña merengue del municipio dona cuatrocientos euros a los comercios locales de productos de desinfección, para contribuir a mantener el pueblo libre del coronavirus

"Que este bicho no entre en el pueblo". El bicho es el coronavirus y quien expresa este deseo, Antonio Castro Lerma, presidente de la Peña Madridista Cambil'92, que con las mismas dosis de esfuerzo que de satisfacción contribuyen con una barrera de solidaridad para que la temida infección se quede fuera de juego en este municipio jiennense. 

No son una entidad económicamente poderosa, ni siquiera tienen sede propia, pero han preferido darlo todo sobre el campo para luchar contra el Covid-19 en lugar de destinar sus exiguos fondos a, por ejemplo, procurarse un techo donde celebrar sus reuniones: "Teníamos previsto un viaje a Madrid el 21 de marzo, con el autobús lleno, con un montón de niños también, pero se ha tenido que suspender; así que ese dinero lo hemos donado", aclara Castro.

Sí, grano a grano, como hormiguitas, este gran "grupo de amigos" (como lo define su presidente) ha juntado los cuatrocientos euros necesarios para costear el desplazamiento a la Ciudad del Manzanares y han preferido que se queden en Cambil, para colaborar con las labores de desinfección que la administración local y los voluntarios del pueblo llevan a cabo diariamente: "Hemos entregado cien euros a cada una de las cuatro tiendas que venden productos para desinfectar, que también lo estarán pasando malamente, porque la gente no puede ir a comprar mucho". 

Un 'doblete' en toda regla: de un lado, muestran su solidaridad con los comerciantes de la tierra que los vio nacer y, de otro, arriman el hombro a la tarea imprescindible de mantener calles y edificios desinfectados. Tiene mérito la iniciativa de una peña cuyos ingresos proceden directamente de los bolsillos de sus socios y que no persigue otro objetivo que devolverles la fidelidad con un buen programa de actividades a lo largo del año:

"Pagamos una cuota anual de cincuenta euros, vendemos Lotería de Navidad, y tenemos un décimo semanalmente; además sacamos beneficios en algunas fiestas que organizamos", dice Castro. Con lo recaudado, los miembros del club disfrutan de "dos comidas al año y un par de viajes, uno al Bernabéu (el que han tenido que suspender), de fin de semana, y otro de ida y vuelta". Se han quedado sin pisar el estadio pero, eso sí, están igual de contentos que cuando el equipo de su alma levanta una nueva copa: "Los socios están satisfechos, en cuanto lo pusimos en el grupo de wasap todo el mundo vio muy bien que hiciéramos esta donación", certifica el máximo responsable de la peña, formada por unos sesenta componentes. 

Si lo habrán hecho bien, que hasta han animado a contribuir a la Unión Deportiva Cambil. Sí, el equipo local no solo aplaude el gesto de los peñistas, sino que sigue su estela y, pese a los gastos que soporta la entidad, ha aportado cien euros a la causa. "El vicepresidente de la UD, Cristóbal Lomas, es miembro de la junta directiva de la peña, así que se animaron cuando conocieron nuestra iniciativa". Eso es contagiar (en el mejor sentido de la palabra), y no lo que hace el coronavirus.