Puente Génave del futuro

Zapeando promociona las Tradiciones del Futuro de Puente Génave

La televisión no perdona. El directo, en especial. Nunca he trabajado en la tele, pero ya en las prácticas en la carrera intuí que no era lo mío. Una vez hice una prueba: narré un pieza alcachofa en mano mientras la cámara me grababa. Creí que todo estaba en orden hasta que al revisar el trabajo mis compañeros, la profesora y yo constatamos algo incómodo: me tocaba la entrepierna en momentos  de la grabación. Nunca supe por qué. La tele.

Zapeando acaba de celebrar un concurso de meteduras de pata en directo. El ganador ha sido Juan y Medio merced a una cagada de connotaciones mucho más sexuales que la descrita antes: dijo en directo lava-vaginas en lugar de lavavajillas. Imposible de superar. No obstante, una vecina de Puente Génave entrevistada por la periodista Gemma Camacho estuvo a punto de arrebatarle el trono al omnipresente conductor de Canal Sur. En plena celebración del Pelele, la reportera da paso al testimonio de la mujer:

—Esto se hace desde 2030. Toda la vida. Y se acabó en 2068 —dice a los gritos.

Y mientras los muñecos son manteados, la audiencia que sigue el reportaje de la fiesta queda en un trance temporal: qué pasa con lo que ve por la pantalla. ¿Es un directo? ¿Una grabación anterior emitida ahora? O el dato de la vecina ha abierto la puerta de una transgresora línea de tiempo: es un fragmento del futuro que la televisión emite en riguroso life. Un quilombo. Habría que consultarlo con Christopher Nolan.

El lapsus en Puente Génave es tan normal como el día a día de los reporteros. Daniel Titinger, cronista peruano, me explicó en un taller que las cámaras, los micrófonos y hasta las libretas son percibidas por los sujetos entrevistados como objetos de máximo peligro. Trampas que los dejarán en evidencia. Creo que la prensa escrita ahí tiene una leve ventaja con respecto a la tele: los plumillas portamos nuestras herramientas más escondidas, como esa gente de campo que de pronto saca del bolsillo una navaja enorme.

El extracto de Zapeando en Puente Génave nos ha abierto el apetito informativo en Lacontradejaén. Habrá que visitar el municipio y descubrir las historias que seguro gravitan en torno al Pelele. Cuando vayamos, ya sabemos por donde empezar: consultaremos el almanaque.