Salvar 400 vidas al año

Los intensivistas andaluces instan a la población a aprender técnicas de reanimación cardiopulmonar con las que en Jaén se podrían salvar 400 vidas al año

Se estima que cerca de 6.600 personas fallecen al año en la comunidad autónoma andaluza por parada cardiaca súbita. El empleo adecuado de técnicas de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) precoz y el empleo de un desfibrilador automático (DEA) en los seis minutos siguientes puede aumentar en un 80% las posibilidades de supervivencia. Por eso, intensivistas andaluces instan a la población a aprender estos métodos, con las que en Jaén se podrían salvar 400 vidas al año.

De ahí que la Sociedad Andaluza de Medicina Intensiva y Unidades Coronarias realice un llamamiento a la sociedad sobre la importancia y utilidad de adquirir competencias de resucitación cardiopulmonar. Pero para ello es necesario hacer a todos los profesionales socio-sanitarios y a la población mucho más competente, a ojos del colectivo. Actualmente, cuando el paro cardiaco sucede fuera del hospital sólo una de cada cinco víctimas recibe la reanimación, una intervención que, realizada a tiempo y sin esperar a los profesionales especializados, puede lograr que la persona sobreviva, y además lo haga sin secuelas.

No se trata solo de que salvar vidas,  “además, la resucitación cardiopulmonar a tiempo reduce considerablemente las secuelas neurológicas". Así lo explica el Dr. Ángel García Alcántara, coordinador del Plan Nacional de RCP en Andalucía. “Por cada minuto que el paciente está en parada cardiorrespiratoria sin maniobras de resucitación, las posibilidades de supervivencia se reducen un 10%, por lo que al cabo de 10 minutos estas posibilidades son mínimas. De ahí la importancia de actuar rápido y siguiendo las recomendaciones del Plan Nacional de RCP”, subraya. 

Desde la sociedad se insiste en la importancia de extender las competencias básicas en soporte vital básico (SVB) y manejo de equipos de desfibrilación automática (DEA) a toda la población. Para eso, son importantes jornadas masivas de formación como la que se celebró esta semana en Málaga, en la popular calle Larios.