Compañeros de éxitos

Boyis, Chino y Dídac, con pasado en el Jaén FS y que ahora compiten juntos en la selección española, disputan este martes los cuartos de final de la Eurocopa de fútbol sala

Eran la columna vertebral. Dídac se encargaba de parar cualquier tentativa de gol, Boyis de portar el brazalete de capitán y Chino de anotar todo lo que le pasaba cerca. Los tres formaron la el eje central que permitió al Jaén Paraíso Interior coronarse por segunda vez campeón de la Copa de España, en 2018, en un escenario de tal magnitud como el Palacio de los Deportes de Madrid y ante el anfitrión, el Movistar Inter. Ese buen papel les permitió recibir ofertas irrechazables: el portero volvió a casa, el FC Barcelona, al igual que el cordobés, mientras que el albaceteño aceptó el proyecto del Xota antes de embarcarse en la nave del Valdepeñas.

No volvieron a coincidir en una gran cita hasta que Fede Vidal les convocó para la Eurocopa que se está celebrando en Países Bajos, donde vuelven a compartir el mismo escudo en el pecho. Este martes (20 horas, Ziggo Dome de Ámsterdam) disputan los cuartos de final del torneo continental e inician otra serie de partidos a vida o muerte con el objetivo de levantar el octavo entorchado del combinado nacional, que no gana nada desde 2016. Demasiado tiempo para una selección como la española, exigida al máximo.

Queda algo de aquel equipo que campeonó en el WiZink Center, fue finalista de Copa del Rey y semifinalista de Liga. "Es verdad que teníamos un ambiente sano y espectacular, con mucha fuerza y eso permitió que hiciéramos muy buenas temporadas. Un gran vestuario hace que sea más fácil competir", asegura quien defendió la portería jiennense durante tantos partidos. De hecho, Dídac y Boyis compartían piso en Jaén durante el tiempo en el que lucieron la camiseta amarilla antes de salir juntos al Barça. "Hicimos una amistad muy buena y eso es también importante a la hora de jugar en la pista", asevera el cierre.

"Esa Copa fue un sueño y ahora estoy en otro, ojalá conseguirlo aquí también. Para nosotros el Mundial fue una catástrofe porque teníamos muchas ilusiones puestas, pero hay que pasar página y ahora estamos a un grandísimo nivel. Nuestro único objetivo es ganar el Europeo", comenta Chino en las horas previas al encuentro ante la Eslovaquia de Drahovsky, pívot del Industrias Santa Coloma y vigente máximo goleador de la Liga española, donde este año sigue en unos números de apetito insaciable.

La Historia, de momento, sonríe a La Roja, que en las 11 ediciones anteriores ha llegado a las semifinales del campeonato. Boyis quiere seguir ampliando su palmarés a los títulos ya conseguidos con todos sus clubes (Jaén, Barça e Inter): "He tenido un poquito de suerte, ya que allí adonde he ido, he ganado, y en la selección siempre digo que ponerse esta camiseta es un sueño hecho realidad. Ojalá podamos llevarnos este Europeo porque sería de lo más grande".

Dídac es una pieza clave, uno de los porteros más completos del mundo no sólo porque detiene balones, sino por su manejo con el pie, que permite a España tener un factor sorpresivo por la toma de decisiones y la visión de juego. Poco a poco muchos equipos (y las propias selecciones) buscan este perfil en su plantilla. “No considero que sea una necesidad, pero hoy día contar con el máximo número de recursos posibles hace que tengas ventaja. En mi caso, el hecho de dar salida y aportar calidad es una destreza más para seguir compitiendo y tener el control del partido en algunos momentos y determinados aspectos. El deporte evoluciona y el fútbol sala también, hay que tener muchas armas para poder ganar los encuentros porque todo el mundo ha mejorado mucho y la igualdad es máxima.”.

Enfrente estará la inexperiencia del debutante, Eslovaquia, que en su primera participación ha logardo alcanzar las eliminatorias, con la ilusión por delante y sin tener en cuenta el 7-1 que les endosó Rusia en la fase de grupos. Chino, Boyis y Dídac intentarán mantener el ambiente que les ha permitiro ser compañeros de éxitos.