La Reina de La Campiña aguarda ya la visita de los romeros

La Virgen de Alharilla preside el presbiterio de su santuario de Porcuna, que la cofradía ha ampliado para solemnizar los actos que la pandemia permita celebrar

Con el manto azul pavo conocido como 'el de rejilla' y, el Niño, vestido de tisú de plata. Así de hermosamente indumentados se encuentran la Virgen de Alharilla y su Hijo en el altar mayor de su santuario de Porcuna, donde aguardan ya la visita devota de los romeros que, por segundo año consecutivo, no podrán disfrutar de sus fiestas a cielo abierto, por culpa de la pandemia. 

Un presbiterio que, según informa la cofradía que preside Francisco Chiachio, "se ha ampliado" y que incluye la colocación, a los pies de la Madre de Dios, de "la antigua reja que poseía la zona del altar mayor en las últimas décadas del siglo XX": "La reja ha sido rehabilitada para así servir de protección a la Virgen y su entorno, dando más recogimiento al lugar donde se establece el Sacramento de la Eucaristía. Próximamente se publicará el proceso de intervención y rehabilitación", aclara Chiachio.

2021 viene huérfano de romería, pero no de estrenos, como la cinturilla bordada en oro fino que la Señora ha recibido en donación y que luce estos días, plenos de celebraciones organizadas por la hermandad.

"Desde la Junta de Gobierno les invitamos a todos los fieles devotos a participar en los actos que celebramos en honor a la Patrona de Porcuna durante este mes de Mayo y a vivir de una forma más especial si cabe esta romería donde Ella se hace esencial en este tiempo que vivimos", comunican. 

La agenda se abrió el pasado sábado con la eucaristía de inicio de las fiestas patronales, que contó con la ilustración musical del coro Sones de La Campiña. Una cita a la que siguió la bendición de medallas y estadales.

Ya el próximo jueves, 6 de mayo, y hasta el sábado, a partir de las seis de la tarde, llegará la ofrenda floral a la Virgen; una piadosa costumbre que se llevará a cabo con todas las normas de seguridad, para evitar el más mínimo riesgo de contagio, aclaran desde el colectivo patronal porcunense.

El sábado día 8, a partir de las diez de la noche, se cantará la salve a la Reina de La Campiña, de la mano del Coro Romero Alegría del Llano, en tanto el domingo 9 se desarrollarán las celebraciones propias del día grande de la Virgen de Alharilla. 

Así, a las once y media de la mañana, el obispo de la diócesis, monseñor Amadeo Rodríguez Magro, presidirá la solemne fiesta religiosa y misa de cofradías en honor de la patrona. Una eucaristía que contará con la aportación musical del coro Sentir Alharillero.

Por la tarde, la nostalgia, las ganas de romería tendrán su momento de eclosión con el repique de campanas de todas las parroquias del municipio y el disparo de cohetes, que harán aparecer las lágrimas en los rostros de los romeros, de los enamorados de la Señora (que se cuentan por miles). Y todo con el consuelo de que, si puede ser, 2022 devolverá a Porcuna su fiesta grande.