Fernando Casado Aparicio vuelve a gobernar La Santa Cena

La "alta participación" de cofrades en las elecciones del colectivo jiennense otorgan la confianza al único candidato, que fue hermano mayor entre 2014 y 2017

La vida cofrade de la Hermandad Sacramental de Jesús Salvador en su Santa Cena y María Santísima de la Caridad y Consolación no se detiene a pesar de los pesares, y eso que sus pesares son pesados, difíciles, desalentadores si no fuese por la fe inexorable que mueve a los hermanos de este colectivo y, ante las más terribles circunstancias, los alienta a seguir.

Con su residencia de mayores afectada por el coronavirus hasta el punto de haber llevado la muerte al mismo seno de la comunidad, la cofradía de la tarde del Domingo de Ramos quiere mantener viva su misión en la capital y, ayer mismo, afrontó una de las citas trascendentales de su agenda: las elecciones.

Con una única candidatura aspirante al gobierno de La Santa Cena, encabezada por Fernando Casado Aparicio, (hermano mayor entre 2014 y 2017) junto con Antonio Jódar Linares y Carmen Ramírez Martínez, la iglesia de San Juan Pablo II, en el barrio del Bulevar, acogió unos comicios inesperadamente concurridos, en palabras del propio Casado: 

"Todo se desarrolló con mucha normalidad y hubo mucha participación; nos quedamos sorprendidos de los cofrades que acudieron", celebra.

Y es que de los 289 cofrades de pleno derecho citados a las urnas, finalmente se emitieron 108 (un 38 por ciento sobre el mínimo establecido, de un 25 por ciento), de los cuales 104 papeletas se pronunciaron a su favor.

En sus propias palabras, se abre un camino "lleno de ilusiones y proyectos", eso sí, marcado por la incertidumbre que impone la pandemia: "En fin, vamos a ir capeando el temporal; los tiempos que vienen son muy complicados y los proyectos están cogidos con alfileres y a expensas de lo que disponga la situación, pero queremos tirar para adelante y sacar los proyectos que están en marcha", afirma.

A la espera de que el Obispado refrende la decisión de los cofrades, Casado concluye: "Hay que ilusionar a los cofrades y mantener el espíritu encendido". Por falta de experiencia no será, desde luego. Ni de ganas.