Todo preparado para el comienzo de las obras en el mercado de Linares

El Ayuntamiento adjudica la primera fase de la rehabilitación de la plaza de frutas y verduras, que albergará a los minoristas que perdieron sus puestos por el derrumbe del Mercado de Santiago hace cuatro meses

Hace cuatro meses, diecisiete familias perdieron prácticamente todo a consecuencia del derrumbe del Mercado de Santiago. Desde entonces solo unos pocos han conseguido reactivar su actividad gracias a la ayuda de familiares y amigos. Otros, en cambio, siguen sin la posibilidad de trabajar debido a que no puede hacer frente al pago del alquiler para instalar el puesto. Su situación es "desesperada", aunque acaban de recibir una noticia esperanzadora: las obras de la primera fase de rehabilitación de la plaza de frutas y verduras, donde volverán antes de la campaña de Navidad, ya han sido adjudicadas.

La empresa encargada del acondicionamiento del suelo, el fortalecimiento de las estructuras y otros servicios será la cordobesa Antroju SL por valor de 62.195 euros, diecisiete mil menos de lo presupuestado en un principio por el Ayuntamiento de Linares. Si todo marcha bien, la constructora se pondrá manos a la obra de "en unos días", según informa el teniente de alcalde, Joaquín Robles. Por delante tendrá un mes y medio de plazo de ejecución, por lo que el primer tramo del proyecto de rehabilitación puede estar listo para mediados de septiembre.

Paralelamente, la Administración municipal ya ha emprendido los trámites para la redacción de la segunda fase que estará licitada y adjudicada a la vuelta de las vacaciones de verano para que no demorar los trabajos que comenzarán inmediatamente después de concluir los de acondicionamiento. El objetivo que se marca el equipo de Gobierno es que los comerciantes estén instalados en su nueva ubicación antes de la campaña de Navidad. Las obras serán sufragadas con las aportaciones de la Diputación Provincial de Jaén y del Gobierno autonómico. Robles asegura que será un espacio moderno y acorde a las necesidades de la ciudad.

La mayor parte del edificio estará destinado a puestos, pero también habrá un espacio para actividades complementarias relacionadas con la gastronomía, similares a las que existen en otras plazas que tan buenos resultados están dando. Joaquín Robles ya ha informado a la abogada de los placeros de la adjudicación y de los trámites que se llevan a cabo para continuar con la reforma.

DE VUELTA A LA PLAZA CUATRO AÑOS DESPUÉS

Los minoristas regresarán al mismo lugar que abandonaron cuatro años antes debido a su precario estado. La plaza de abastos destinada a la venta de frutas y verduras, un edificio construido en la década de los ochenta entre la calle Baños y Santiago, echó el cierre definitivo a principios de diciembre de 2014 para trasladarse al Mercado de Santiago, conocido como el de carne y pescado. Cosas del destino o la mala fortuna, su estancia en el emblemático edificio ha durado más bien poco. Una ráfaga de viento de intensidad media bastó para destruir un monumento de Linares y más de treinta empleos vinculados a él. El derrumbe del centenario mercado de abastos de la ciudad a causa del temporal dejó sin actividad a una veintena de comerciantes que siguen exigiendo responsabilidades por la pérdida de el espacio en el que vendían sus productos. El portavoz del colectivo de minoristas, Tomás Vico, asegura que hay compañeros que lo "están pasando realmente mal", incluso algunos -dice- sufren una "fuerte depresión".